El Tercer Juzgado de Garantía de Viña del Mar falló a favor de las víctimas del cierre del plantel.
A partir de los diferentes casos, la Corte identificó a cuatro grandes grupos de afectados.
La crisis de la Universidad del Mar estalló cuando el rector Raúl Urrutia renunció denunciando que el retiro de utilidades por parte de los controladores.
El Tercer Juzgado de Garantía de Viña del Mar ordenó el pago de indemnizaciones a la totalidad de los alumnos que estaban estudiando o permanecían ligados a la Universidad del Mar al momento de solicitarse su cierre por parte del Mineduc, acogido por el Consejo Nacional de Educación a fines de 2012.
Según informó El Mercurio de Valparaíso, el pronunciamiento judicial responde a una demanda colectiva interpuesta por el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) en octubre de 2012 y contempla alrededor de 20 mil beneficiarios.
"El tribunal condena a los representantes de la Universidad del Mar a indemnizar a prácticamente todos los alumnos y ex alumnos del plantel", señala el medio, que recuerda que la acción del Sernac pedía el reconocimiento de al menos 10 "cláusulas abusivas" estipuladas en el contrato que cada alumno firmó al ingresar al plantel, y la indemnización incluyendo un pago por el detrimento de los títulos profesionales.
La publicación revela que la sentencia fue emanada el 8 de enero de este año y que, en ella, "el tribunal acogió gran parte de la solicitud" del Sernac, pero éste ya apeló en orden a que "todas sus solicitudes sean cumplidas".
El Tercer Juzgado Civil de Viña del Mar decretó en abril de 2014 la quiebra de la Universidad del Mar, que quedó a cargo del síndico Cristián Herrera, quien también "apeló a la totalidad de la sentencia y se espera que los antecedentes de ambos recursos sean vistos en la Corte de Apelaciones de Valparaíso en las próximas semanas", señaló el matutino.
Herrera argumentó que los acreedores del plantel - a quienes representa - han sido "tanto o quizás más afectados que los alumnos de la casa de estudios".
Cuatro grupos a resarcir
De acuerdo con la información, la corte identificó a cuatro grupos distintos de estudiantes afectados: el primero, quienes fueron reubicados en otras universidades o terminaron sus últimos años de estudio en la propia Universidad del Mar.
Para ellos, la sentencia estipula que se les deberá pagar el dinero gastado en traslados a otras casas de estudios u otras sedes equivalentes a la beca Junaeb de la Universidad del Mar según tramos, con un monto mínimo de 32 mil pesos por 10 meses, que corresponde al primer tramo de la beca.
El segundo grupo lo componen los estudiantes que se reubicaron en 2013 en otras universidades de forma individual y que, por ende, dejaron de ser estudiantes de la U. del Mar.
A estos estudiantes les corresponde una indemnización por el retraso académico debido a convalidaciones parciales y/o nivelaciones que hayan debido realizar.
El tercer grupo merecedor de indemnizaciones son los alumnos cuya reubicación en otras instituciones no fue posible y, por dicha razón, no continuaron con sus estudios.
En este caso, señaló la Corte, se les indemnizará con un monto equivalente al arancel de las respectivas carreras que cursaban al año 2012 en la Universidad del Mar.
El último grupo de alumnos está compuesto por quienes cursaron ramos en la Universidad del Mar que no pudieron convalidar ni homologar con otras instituciones y, en consecuencia, suponen para ellos estudios perdidos.
A ellos se les compensará el valor de todas las matrículas y aranceles pagados durante todos los años de permanencia en la Universidad del Mar, de acuerdo con la publicación.
"No creo que alcancen los dineros"
Consultado por esta resolución judicial, Raúl Soto, principal dirigente estudiantil de los alumnos estafados por el plantel, se mostró escéptico ante la posibilidad de que se concreten las indemnizaciones.
"Nosotros siempre planteamos que un síndico de quiebras o el Sernac no tenían nada que hacer con el tema educacional. Este fallo, si bien beneficia a los estudiantes de la Universidad del Mar –y está muy bien, no me opongo a eso- tiene una génesis bastante oscura con respecto a la visión que existe de la educación, donde las universidades son un negocio, los estudiantes son clientes y la educación es un bien de consumo", recordó Soto.
En este caso "hubo paraísos fiscales y se destinaban dineros de la Universidad del Mar a gastos personales de los dueños de la casa de estudios, entonces, mientras nosotros no tengamos certeza de que se está contando con el 100 por ciento del patrimonio de la institución y de los dueños de la Universidad del Mar para poner al servicio del pago de indemnizaciones, no creo que alcancen los dineros", señaló el estudiante.
La vocera nacional de los estudiantes de la institución, Susana Giacaman, comentó que "nosotros somos súper realistas, esto marca un precedente porque por fin la justicia después de cuatro años está fallando a favor de las víctimas del lucro".
"Queremos que el Estado se haga responsable, porque sabemos que el Estado tiene responsabilidades civiles en todo lo que fue la estafa que nos ocurrió a nosotros, desde el momento en que se autorizó a una universidad sin ningún criterio", añadió.
