La casa de estudios tiene actualmente una deuda de 91.868 millones de pesos.
Su rector evalúo los pasos a seguir que contemplan, además, el cierre de carreras.
El rector José Dörner confirmó que se estiman alrededor de 200 y 300 despidos entre el profesorado de la Universidad Austral de Chile (UACh) para abordar la deuda de 91.868 millones de pesos.
El plan, aprobado por la Superintendencia de Educación Superior (SES), también contempla llamar a retiro a un centenar de funcionarios, proceso que se realizará durante este 2024.
Asimismo, el plan de recuperación estipula una reestructuración y/o eliminación de unidades poco eficientes, sin descartar la fusión o incluso eliminación de carreras con pocas matrículas, publicó este lunes El Mercurio.
También se lanzará una campaña comunicacional para que los exalumnos paguen sus deudas con al casa de estudios.
Dörner, quien asumió la semana pasada luego de la renuncia del hasta entonces rector Hans Richter en medio de la crisis administrativa y económica que vive el plantel, sostuvo al diario que para salir adelante deberán considerar tres dimensiones.
"Retomar el equilibrio financiero, fortalecer nuestra capacidad de gestión y control financiero, y mejorar al mismo tiempo nuestra capacidad de alineamiento en la toma de decisiones de gobierno institucional", explicó.
Así, uno de los principales objetivos será "racionalizar" la plantas académicas y administrativas. Actualmente la casa de estudios tiene 3.700 funcionarios, de los cuales 1.200 son profesores. La matrícula, en tanto, es de 17.300 estudiantes, por lo que la Superintendencia consideró que hay una "sobredotación" de docentes.
"De acuerdo con la SES, tenemos una sobredotación de académicos y docentes. Atienden estudiantes, pero lo que pasa es que probablemente no están haciendo todas las horas de clases que deberían hacer", explicó el rector quien precisó que, para acercarse a las cifras del Consejo de Rectores, deberían rectorar "entre 200 y 300 (docentes), probablemente".
Respecto al cierre de carreras, José Dörner explicó que la Superintendencia "nos solicitó tener una metodología para analizar la sostenibilidad financiera de las carreras. Sobre esa base se va a determinar qué carreras están sin problemas, cuáles están situación de alerta y cuáles en situación crítica".
"Es muy probable que en aquellas carreras que estén en situación crítica, vamos a tener que analizar -tomando el rol que cumplimos como universidad- cerrarlas, fusionarlas, discontinuar la matrícula por un año... son distintas alternativas que se pueden tomar", comentó.
El rector además resaltó que existen 70 mil millones de pesos en cuentas por cobrar a exestudiantes. En ese sentido, indicó que "estamos implementando un sistema de cobranza temprana para los estudiantes, tratando de ofrecer un mejor servicio. Si tenemos esa cartera de cuentas por cobrar, es también responsabilidad de nosotros como universidad".
"La universidad cometió errores de gestión, un descontrol absoluto que se produjo en algún momento de los últimos 10 años. Ahora estamos abocados en recuperar la sostenibilidad financiera", planteó.
