Como una situación que se ha repetido en semanas anteriores calificó la ministra de Minería y Energía, Karen Poniachik, la falta de gas natural argentino que experimentan industrias de Santiago, Concepción y Valparaíso.
Así, la secretaria de Estado descartó que el corte del suministro del hidrocarburo sea una "represalia" por la carta que envió la Presidenta Michelle Bachelet a su homólogo argentino, Néstor Kirchner, para expresar su molestia por el alza en el precio del gas que decretó Buenos Aires.
Poniachik recordó que durante junio pasado también hubo días sin suministro.
La situación declarada el pasado fin de semana, agregó, se debe al aumento de consumo local de gas, por la ola polar que afecta a Buenos Aires.
La política del Gobierno de Kirchner es privilegiar la satisfacción de la demanda interna por sobre la exportación de hidrocarburos, aunque esto implique no cumplir con los contratos de envío firmados por las firmas que comercializan el gas con sus pares chilenas.
El pasado 27 de julio, la Presidenta Bachelet informó personalmente sobre la carta que envío a Kirchner, en la que le expresó su "decepción" por la forma en que Argentina manejó el aumento de precios del hidrocarburo.
La misiva, según el senador PPD Roberto Muñoz Barra, fue recibida con "ira" por el mandatario trasandino.
Consultada por la eventual huelga en la minera Escondida, Poniachik declinó emitir comentarios y sólo señaló que el Gobierno no interviene en procesos de negociación al interior de una empresa privada. (Cooperativa.cl)