Nadie somete a evaluación un proyecto así para ser rechazado, dijo el académico Nicolo Gligo.
Con él aumentará la huella de carbono, que el país se comprometió a reducir al 2020, dijo.
El director del Centro de Análisis de Políticas Públicas, del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, Nicolo Gligo, manifestó que la aprobación que otorgó este viernes el Servicio de Evaluación Ambiental a la termoeléctrica Castilla era una decisión que ya estaba tomada.
Según el académico, ningún proyecto de la envergadura de esta central, que pretende ser la más grande de Sudamérica, podría ser detenido por una instancia ambiental, dado que la legislación actual es muy laxa.
"Es obvio que un proyecto de esta magnitud había sido discutido previamente y corresponde a una política de Gobierno y que es una decisión tomada con anterioridad. Acá nadie va a someter a la Comisión de Evaluación de Impacto Ambiental un proyecto de esta envergadura para ser rechazado, el proyecto está tácitamente aprobado", señaló el profesor.
Según Giglio, "no es difícil aprobar proyectos como este, pero eso no quiere decir que el proyecto sea positivo para el país o para la comunidad. Es cuestión de analizar la historia de los proyectos de los últimos 15 años en el país y vamos a ver que muy pocos fueron rechazados".
Demanda energética
Por otra parte, según el experto, la comunidad nacional debe asumir los costos de la creciente demanda energética, pero ello debiera ser distinto.
"Hay un costo que lo está absorbiendo la población, por lo tanto podemos generar energía desde fuentes más limpias, a un costo relativamente mayor que no repercuta en la población sino en los principales demandantes de esa energía, que son principalmente las empresas mineras", señaló.
El profesor Giglio criticó además que con la aprobación de la central Castilla se intensificará la huella de carbono en el país.
"Este proyecto viene a intensificar la matriz energética carbonizada, es decir en vez de disminuir nuestro carbono en la atmosfera y que tenemos un compromiso de bajar un 20 por ciento al 2020, pero lo hemos aumentado en forma muy significativa y parece que al 2020 lo vamos a duplicar, es decir, vamos a ser uno de los países con mayores niveles de carbono per cápita", expresó.
