El mecanismo se implementó tras el escándalo de "Pacogate" y ya ha dado pie a 17 investigaciones por presuntos delitos.
Incluyen abuso sexual, cohecho y destrucción de evidencia, entre otros.
La línea "delatora" se enmarca en la política de modernizar Carabineros y "no aceptar ninguna situación irregular".
Un total de 120 denuncias internas se han registrado al interior de Carabineros en los 10 meses desde el lanzamiento de la línea "delatora", que permite a funcionarios acusar presuntas conductas o situaciones irregulares por parte de sus compañeros o superiores.
Esta plataforma fue anunciada en agosto de 2017, dentro de una serie de modificaciones internas para "modernización" de la institución tras el megafraude del "Pacogate", que ya alcanza los 28 mil millones de pesos.
De acuerdo con las cifras que publica hoy La Tercera, obtenidas vía Ley de Transparencia, en 2017 se registraron 83 denuncias, de las cuales 14 presentan indicios de situaciones delictuales, mientras que este año han sido 37 hechos irregulares los informados, de los cuales tres serían ilícitos.
De esa manera, las denuncias han permitido abrir 17 investigaciones por supuestos delitos, entre las que hay dos por presunto abuso sexual, dos por cohecho, una por destrucción de evidencias, dos por entrega de información privilegiada y tres por usurpación de funciones, cuyos antecedentes también fueron derivados al Ministerio Público.
"No aceptar ninguna situación irregular"
La linea "delatora" está a cargo del Departamento de Asuntos Internos de Carabineros, que antes estaba bajo el alero de la Dirección de Inteligencia, pero que hoy depende de la Contraloría Interna.
Desde la institución uniformada comentaron al matutino que ésta "es una forma más de denunciar" y que "no es necesario hacerlo en forma anónima".
"Aquí hay respeto y cuidado por quienes denuncian o informan", todo en el marco de "mejorar y no aceptar ninguna situación irregular".
