Mientras se juega la última carta para postergar su formalización, el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, despliega durante esta semana una serie de ceremonias internas de "despedida" antes de su inminente renuncia, que debe materializar en línea con el estándar fijado por el Gobierno -si una autoridad está imputada en el marco del cumplimiento de sus funciones, "tiene que dejar el cargo"-.
A Yáñez se le formalizará junto a su predecesor, Mario Rozas, y al exsubdirector Diego Olate por el delito omisivo de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves y homicidio, presuntamente cometido entre octubre de 2019 y el 31 de marzo de 2020, época del estallidos social en que el actual jefe la policía ejercía como director nacional de Orden y Seguridad.
La audiencia, originalmente fijada para el 7 de mayo, fue aplazada para el próximo martes 1 de octubre.
Aunque Yáñez podría dimitir el día antes, decidió adelantar su salida para esta semana, con el objetivo de dar señales de "normalidad" en la institución, y de esa manera también podría participar de la ceremonia de cambio de mando, de acuerdo con La Tercera.
Asimismo, pretende diferenciarse de sus tres antecesores, quienes salieron en medio de escándalos: Bruno Villalobos, en 2018, por la "Operación Huracán"; Hermes Soto, a fines de ese mismo año por el caso Catrillanca; y Rozas, en 2020, cuestionado por excesos de Carabineros en el Sename y durante el estallido social.
En este escenario, Yáñez ha realizado ceremonias internas significativas para el término de su mandato, y que dentro de la institución son vistas como "gestos simbólicos de despedida".
La tarde de ayer martes visitó la 43° Comisaría y la Subcomisaría de Peñalolén, las que más ataques recibieron durante el estallido.
En tanto, la mañana de este miércoles se desplegó en la Cuarta Comisaría de Santiago "SOM Daniel Palma Yáñez", renombrada en homenaje al funcionario asesinado el 5 de abril del 2023 en la avenida Matta. Allí se reunió con las viudas de los mártires de Carabineros, acto considerado como uno de los más significativos para el general, ya que durante su periodo 21 policías murieron en acto de servicio, 13 de ellos asesinados, y algunos de los homicidios derivaron en la creación de la Ley Naín-Retamal.
Luego, esta misma jornada Yáñez se trasladó hasta el Hospital de Carabineros para dar muestra del bienestar de los uniformados y para encabezar la inauguración del área de Imagenología, que integrará equipos de última generación.
ÚLTIMA CARTA JUDICIAL
Si bien los continuos intentos de postergar la formalización del 1 de octubre han sido infructuosos, la defensa de Yáñez ingresó este miércoles una nueva reposición para solicitar con urgencia la realización de una audiencia de cautela de garantía vía telemática, según La Tercera.
El propósito es alegar que la ausencia de su abogado titular, Jorge Martínez, quien presentó una licencia médica por problemas cardiacos y está hospitalizado, haría imposible que pueda ejercer su derecho a defensa, dado que es el único que conoce toda la causa de miles de fojas.
Al requerimiento se sumaron los abogados de Rozas y Olate.
De resultar exitosa esta estrategia, Yáñez podría completar su período como general director, que vence el 19 de noviembre, puesto que la licencia médica de su principal defensor es de 90 días.