El ministro Alberto Espina defendió al general Ricardo Martínez tras el procesamiento del número 2 de la institución, John Griffiths, por fraude al Fisco.
El comandante en jefe Jorge Martínez asumió en el cargo en marzo de este año.
El ministro de Defensa, Alberto Espina, respaldó al comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, tras las situaciones conflictivas que se viven en la institución militar que encabeza.
El Ejército vive momentos complejos tras conocerse de la renuncia del jefe del Estado Mayor Conjunto, John Griffiths, quien fue procesado por fraude al Fisco por hechos ocurridos entre 2011 y 2014.
El ministro Espina aseguró que la situación le preocupa y le duele.
Sin embargo, ante las peticiones de una posible destitución del comandante en jefe, Espina respondió que "son hechos que ocurrieron hace muchos años y mucho antes de que el comandante en jefe asumiera su cargo. Él asumió su cargo el día 10 de marzo de este año".
"El comandante en jefe ha expresado en todo momento, no solo de palabra, su colaboración que lo ha hecho en todos los planos relacionados con la probidad y la eficiencia y disciplina de las Fuerzas Armadas", aseguró.
El comandante en jefe del Ejército rompió su silencio
El comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, finalmente rompió su silencio y, además de defender al jefe del Estado Mayor Conjunto, John Griffiths, respondió a quienes piden su salida.
"Tengo muy en cuenta que mientras cuenta con la confianza del Presidente de la República, voy a estar en el cargo. Creo que he actuado con rectitud cuando se habla de responsabilidad de mando", manifestó la máxima autoridad del Ejército de Chile.
Al ser consultado sobre si cree la versión que le transmitió el general Grtiffith, Martínez respondió que "no tengo por qué prejuzgar a una persona mientras los tribunales de justicia no hayan llegado a un veredicto final".
A la polémica del número 2 del Ejército también se suma el homenaje que se hizo al ex agente de la DINA, Miguel Krassnoff, condenado a más de 600 años de cárcel por violaciones a los derechos humanos, que terminó con la salida del director de la Escuela Militar.
