El comandante en jefe del Ejército, el general Ricardo Martínez, confirmó que los ocho conscriptos dados de baja por una golpiza y abuso sexual contra un compañero en un regimiento de Calama en el que cumplían su servicio militar obligatorio están confesos de los hechos.
En una declaración pública, el jefe del Ejército manifestó que los conscriptos "están confesos que efectivamente agredieron al soldado conscripto y hubo también una agresión sexual que no la voy a detallar".
El general además se refirió a las posibles causas de esta agresión y recalcó que aún se desarrolla la investigación.
"Las razones al parecer fueron rencillas entre ellos, pero no quiero adelantar nada todavía, porque es parte del proceso investigativo que está efectuando el general (Rafael) Fuenzalida", añadió el general Martínez.
La víctima, de 18 años, perteneciente a la Brigada Motorizada Nº1 de la mencionada ciudad, se encuentra internado en el Hospital Carlos Cisternas de Calama y debió ser intervendo por la gravedad de sus lesiones.
Remueven a comandante encargado de la unidad
El jefe de la Primera División del Ejército, general de brigada Rafael Fuenzalida, se trasladó hasta Calama, donde confirmó la remoción del cargo del capitán comandante de la unidad donde ocurrieron los hechos.
"He dispuesto hoy, que en virtud a la transparencia de la investigación, el relevo del comandante de compañía de la unidad con el objeto que la investigación sumaria administrativa, a cargo de quien habla, esté terminada en 10 días y podamos tener resultados de acciones disciplinarias drásticas con respecto a la situación en la cual se han visto involucrados soldados de nuestra Brigada Motorizada de nuestra división", afirmó.
Sobre la indagatoria, detalló que "se definirán las responsabilidades que correspondan en cuanto a los controles que hubo que tener por parte de la unidad de mantener el control con respecto a la instrucción, el entrenamiento y al resguardo en esta brigada motorizada".
Los involucrados en este hecho se encuentran recluidos en dependencias de la unidad por orden de la Fiscalía Militar, donde están separados.
"Expulsarlos de la institución en estos momentos fue una resolución administrativa y es el máximo de sus atribuciones. Hoy ellos están en un proceso que se lleva en la Fiscalía Militar y por eso están detenidos, por lo cual creo que se adoptaron las medidas disciplinarias con el máximo del rigor", indicó Fuenzalida.
Ministro de Defensa: Nada justifica este acto criminal
En tanto, el ministro de Defensa, Alberto Espina, llamó a la tranquilidad a los padres de integrantes de las Fuerzas Armadas por este hecho, sostiendo que este tipos de casos serán sancionados severamente.
"No hay razón alguna ni circunstancia alguna que justifique un acto criminal como es que ocho conscriptos golpeen brutalmente a otro e incluso lo puedan agredir sexualmente", comentó el secretario de Estado.
"Todas las familias cuyos hijos, hombres o mujeres, pertenezcan a las Fuerzas Armadas tienen que tener la seguridad que se van a realizar siempre en forma preventiva y posteriormente sancionando duramente cualquier acto que signifique vulnerar la dignidad y los derechos de quienes integran el Ejército de Chile", recalcó el ministro.
Joven fuera de riesgo vital
Mientras, fuentes del Hospital de Calama manifestaron que la víctima fue atendida en dos ocasiones anteriores de forma ambulatoria. El pasado 7 de junio ingresó por la ingesta de medicamentos y unos cortes que presentaba en los brazos, los que no eran de gravedad y fue enviado de vuelta al regimiento.
Una semana después, el día 14, volvió por fuertes dolores abdominales y posterior a eso se produjo una nueva revisión más exhaustiva, la que arrojó que presentaba lesiones de gravedad y tenía que ser intervenido de manera urgente, lo que motivó la denuncia de la situación a Carabineros.
El joven se encuentra internado en el servicio medico quirúrgico del Hospital Carlos Cisternas de Calama, fuera de riesgo vital y su estado es reservado.
La familia realiza gestiones para trasladarlo a otro centro asistencial, según indicó el padre de la víctima.
"No hay mucha claridad sobre la operación que viene, ya que no están los medios y el médico es uno solo, así que tiene otros casos, al parecer, prioritarios y no tenemos una fecha exacta de cuándo se va a realizar la operación, por eso es que se está viendo el tema de si se puede trasladar a un lugar donde tenga los medios suficientes para poder hacer los exámenes y la operación", indicó.
Reconoció que "estamos destruidos como papás, como hijos, como familia".
"El tema de las acciones (judiciales) lo estamos viendo, ahora en la semana tengo una reunión en Santiago", aseveró.