Defensa desechó la oferta de un consorcio europeo, que representaba un desembolso de unos 40 millones de dólares, y aceptará ofertas para la sona que planea poner en órbita.
El Gobierno de Chile informó que descartó la oferta del consorcio europeo European Aeronautic Defence and Speace Company (EADS) para la compra de un satélite multiuso, por lo que la adquisición del aparato se realizará a través de una licitación internacional.
El Ministerio de Defensa precisó que la medida se adoptó tras someter la propuesta del consorcio EADS a una evaluación técnica y financiera, dentro de los plazos comprometidos con el potencial proveedor.
A través de un comunicado, la secretaría de Estado destacó que se trata de n proyecto "muy interesante para el país", tanto en lo que se refiere a usos civiles como militares.
Sin embargo, explicó que "es conveniente que la adquisición de un bien público de esta naturaleza sea discernido luego de un proceso de licitación internacional, en la cual el Gobierno de Chile espera contar nuevamente con la participación de las empresas EADS".
El consorcio europeo había sido elegido tras una convocatoria cerrada qye se realizó durante la administración del Presidente Ricardo Lagos y que, además de la firma del Viejo Continente, contó con el concurso de una empresa surcoreana, una canadiense y una israelí.
Durante la gestión del ex ministro de Defensa Jaime Ravinet se llegó a un acuerdo de intenciones para adquirir un satélite a la empresa EADS y la operación incluso fue parte de la agenda del mandatario francés Jacques Chirac en su visita a Chile semanas atrás.
Luego de la asunción de Michelle Bachelet como Presidenta, la actual ministra de Defensa, Vivianne Blanlot, solicitó a la empresa EADS un mayor plazo para revisar el proyecto y nombró al subsecretario de Aviación, Raúl Vergara, a cargo de la evaluación del negocio.
La medida se adoptó "por la necesidad de evaluar la importancia de esta operación dentro de las prioridades en la materia y el marco del gasto del sector Defensa y, además, analizar en profundidad las características de los contratos propuestos", precisó el ministerio.
El proyecto, que tenía un costo de alrededor de 40 millones de dólares, fue rechazado por parlamentarios de la Concertación, que habían demandado una mayor transparencia al adquirir el equipo y que éste se destinase a fines exclusivamente civiles.
En 1998, tras una experiencia fallida en 1995, Chile lanzó su primer satélite, el FASAT-Bravo, que dejó de operar en 2001, después de cumplir sus tres años de vida útil. (EFE)
