El Laboratorio de Criminalística de la PDI (Lacrim) estableció en un peritaje fechado el 14 de junio pasado que una firma falsificada del fallecido empresario y político del Partido Conservador Unido Bernardo Larraín Vial permitió a su nieto Bernardo Ossandón Larraín, junto a sus abogados, triangular la fortuna del clan hacia Panamá, y luego al paraíso fiscal de las Islas Vírgenes Británicas con el fin de evadir impuestos en Chile.
Según informa The Clinic Online, el documento se encuentra en poder de la fiscal Centro Norte Macarena Cañas, quien al conocer las conclusiones de los peritos policiales, decretó una nueva diligencia "que puede poner en serios aprietos a esta familia ligada a la élite religiosa, política y empresarial de Chile".
Cañas ordenó que Bernardo Ossandón Larraín se someta a un peritaje caligráfico para determinar si él es el autor de la falsificación de la rúbrica de su abuelo.
También enfrentarán el peritaje los abogados Marko Jürgensen y Rodrigo Ruiz-Tagle, que participaron en la creación de la sociedad Panameña Real State Golden Investment (RSGI) en Panamá y su espejo en la banca off shore, la Fundación Educacional "BLV", y el dirigente de Renovación Nacional Roberto Ossandón Irarrázaval, hermano del vicepresidente de RN y actual candidato a senador por Santiago Oriente, Manuel José Ossandón, y de Ximena Ossandón, ex directora de la Junji y candidata a diputada por La Florida.
Para determinar si la firma de Bernardo Larraín Vial (fallecido en 209) era verdadera o falsa, la PDI buscó su rúbrica en el Registro Civil y en un acta de la junta directiva de RSGI fechada el 7 de octubre de 2008, que fue certificada el 24 del mismo mes en Panamá.
Según The Clinic, Roberto Ossandón Irarrázaval ha caído en serias contradicciones sobre la firma de fallecido Bernardo Larraín Vial. En una oportunidad aseguró que el empresario firmó ante él, pero ante el SII varió su versión, señalando que confió en la firma que le presentaron para generar el mandato que sirvió para hacer la operación en las Islas Vírgenes.
El caso
La investigación de este caso se inició en 2011, cuando Manuel Ossandón Larraín, el hermano de Bernardo -ambos nietos herederos de la multimillonaria fortuna de Bernardo Larraín Vial- presentó una querella criminal en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago.
En la acción legal reclamó a Bernardo su parte de los 200 millones dólares de la fortuna que, asegura, perdió debido a las argucias de su hermano y los abogados antes mencionados.
Los delitos que imputa son apropiación indebida, estafa, prevaricación de abogado y falsificación.
Paralelamente a esta indagatoria el Servicio de Impuestos Internos sustancia otra investigación por fraude tributario que aún está en curso, y en la cual exige al clan el pago 220 millones de dólares por "evasión".