La ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana (Frente Amplio), reconoció en televisión haberse enterado de la denuncia por violación contra el subsecretario Manuel Monsalve recién el día jueves; es decir, el mismo día en que la información se conoció a través de la prensa, y dos días después de que Carolina Tohá y Gabriel Boric ya estaban al tanto.
"Me habría gustado enterarme antes", admitió la exmilitante de Convergencia Social, este sábado, en una entrevista con MEGA.
"El jueves me encontraba llegando a Santiago, después de un largo vuelo desde Ginebra", donde había estado cumpliendo labores propias de la cartera, explicó Orellana.
"Aterrizando, me enteré de lo que ocurría", explicó, para luego indicar que en su criticada declaración inicial, ese jueves, "el foco (...) no estuvo en hablarles a los políticos, sino tratar de recordarle a la ciudadanía cuáles son las leyes, cuáles son los mecanismos (...) para poder acoger a quienes viven violencia sexual".
"Evidentemente, me habría gustado enterarme antes, pero no eso no obsta a que, una vez que tuve conocimiento informal, pedí contrastar la información formalmente, y una vez que fui informada formalmente, cumplí con mi deber", añadió.
Orellana enfatizó que la administración Boric "es un Gobierno que tiene un compromiso firme con los derechos de las mujeres", pero concedió que "todo eso se pone en entredicho, obviamente, cuando se acusa de uno de los delitos más graves de violencia contra las mujeres a una alta autoridad de Gobierno".
"En ese sentido, creo muy relevante que, en menos de 48 horas, el subsecretario Monsalve haya salido de su puesto", sostuvo, y consideró, además, "bastante mezquino que ante un hecho como un delito sexual del que está imputada otra autoridad, lo que intenten sea apuntar al Ministerio de la Mujer, porque desde que tomamos conocimiento del caso hemos obrado según nuestra misión institucional".
"QUIEBRE EN EL COMITÉ POLÍTICO"
Desde el mentado jueves, Antonia Orellana viene siendo foco de las críticas de la oposición, que le atribuye una reacción tibia frente al escándalo. Su desconocimiento sobre el asunto durante todo el martes, miércoles y parte de jueves -reconocido hoy por ella misma-, llama especialmente la atención debido a que el Gobierno de Gabriel Boric se autodeclara feminista, y como símbolo de este espíritu, incluso antes de asumir el poder anunció que el Ministerio de la Mujer ingresaría al comité político.
En esta "exclusiva" instancia gubernamental participan, además del Presidente Boric, los ministros de Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá; de Hacienda, Mario Marcel; Secretaría General de la Presidencia, Álvaro Elizalde; Secretaría General de Gobierno, Camila Vallejo; Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara; y de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana.
Según publica hoy La Tercera, el caso Monsalve provocó un virtual "quiebre" en el grupo, y tanto Orellana como Vallejo "plantearon su molestia porque el diseño de la crisis fue manejado exclusivamente por Interior y Presidencia, sin la participación de nadie más del comité político".
El viernes, tras la inédita conferencia de prensa de 50 minutos de Boric para referirse al escándalo, Vallejo "fue instruida a dar una vocería en la que tuvo que intentar explicar los vacíos que dejó la declaración del Presidente", pero "fuentes de La Moneda aseguran que (...) intentó resistirse a la orden, argumentando que no tenía porqué dar la cara por decisiones que se habían tomado 'a sus espaldas'", señaló el matutino.
Finalmente, con actitud grave, habló ante la prensa y descartó que el Mandatario hubiera incurrido en una "omisión de denuncia" tras su conversación con Monsalve, la noche del martes.