Como una experiencia "excepcional" calificó el Presidente Ricardo Lagos la canonización del sacerdote Alberto Hurtado tras asistir a la ceremonia que encabezó el Papa Benedicto XVI en la plaza San Pedro del Vaticano.
Luego de la homilía, el Mandatario saludó brevemente al Sumo Pontífice para invitarlo a visitar el país durante el viaje que realizará a Brasil en mayo de 2007.
El Jefe de Estado comentó que el Papa se mostró "impresionado" por el fervor de los cerca de 7.000 chilenos que llegaron a la Santa Sede para la canonización.
"Con motivo del saludo que hice a Benedicto XVI, él estaba muy impresionado de la multitud de banderas y chilenos que aquí vio. Señaló al mismo tiempo su impresión por el trabajo social que había hecho Alberto Hurtado", señaló el Presidente.
"Le señalé el reconocimiento de todos los chilenos por lo que había ocurrido hoy y al mismo tiempo me permitió decirle que estoy cierto que lo recibiríamos con un gran cariño y un gran afecto si él visitara Chile. Entendemos lo que es la agenda de un Sumo Pontífice y por cierto agradeció la invitación y la incorporará a su programa futuro", añadió.
Lagos dijo que además de orgullo y de admiración para Chile, san Alberto Hurtado es una inspiración para lograr una sociedad más justa.
"Es motivo de inspiración de cómo somos capaces de hacer una sociedad como él la quiso donde todos fueran tratados iguales en dignidad, como él dijo tanto al débil como al poderoso. Creo que allí tenemos todavía un largo camino que recorrer, es lo que hemos intentado hacer estos años y estoy seguro que se seguirá haciendo en los años futuros", sostuvo.
"Ojalá que esta fiesta que habido hoy con motivo de su canonización sea una fiesta que pueda perdurar al interior de cada uno de nosotros para poder hacer realidad lo que él nos planteó como gran desafío de cómo tener una sociedad más justa, más humana", añadió. (Cooperativa.cl)