El renunciado obispo de Valparaíso Gonzalo Duarte pidió perdón por sus faltas y equivocaciones luego de que este mes el papa Francisco aceptara su renuncia, en medio de denuncias de abuso de poder y sexual, aunque la Iglesia sostuvo que fue por su avanzada edad (75 años).
"A todas y a todos les pido sinceramente perdón por mis faltas, equivocaciones, incomprensiones y desaciertos, especialmente si han causado daño, lo que nunca he querido hacer", expresó Duarte en una carta abierta.
El ahora obispo emérito también agradeció a los sacerdotes de la diócesis de Valparaíso, quienes para él fueron los "principales colaboradores del obispo y quienes llevan el peso más arduo del ministerio".
A su juicio, añadió en la misiva, "reciben a veces duras e injustas recriminaciones por las faltas y limitaciones de la Iglesia".
Duarte, quien estuvo al frente de la iglesia de la Región de Valparaíso por más de 20 años, este tiempo le permitió ganar popularidad, pero también ganar detractores.
"Obviamente esto tiene sus ventajas, por ejemplo, mucha gente me conoce, algunos desde niño. Pero también sus desventajas: Nadie es profeta en su tierra", expresó.
Este sábado, a contar de las 10:30 de la mañana, Gonzalo Duarte presidirá una misa de bienvenida a monseñor Pedro Ossandón, quién ya asumió oficialmente como obispo de la diócesis de Valparaíso.