Este viernes fue formalizado en el Tribunal de Garantía de Rancagua el ex canciller del Arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz, por abusos sexuales y estupro, quedando en prisión preventiva por los 180 días en que se extenderá la investigación.
Durante la audiencia, la Fiscalía presentó los casos de cinco menores que tenían entre 11 y 17 años, relatos que reflejan abusos sexuales ocurridos, algunos en dependencias de la iglesia, como en casas parroquiales que el sacerdote tenía a su cargo, y también en otros lugares, ya que tres de las víctimas son hijos de primos hermanos del sacerdote, es decir, sobrinos segundos, y los otros eran acólitos.
El Ministerio Público además presentó de un caso de estupro contra un menor de 17 años ocurrido más de una vez en 2017.
"Durante la noche del 14 de febrero de 2017 en circunstancias que la víctima se queda a dormir en la casa parroquial (...) finalmente el imputado quebró la resistencia de la víctima y mientras este se encontraba acostado de espalda se ubicó entre las piernas de la víctima y lo penetró por vía anal", relató en la audiencia el Ministerio Público.
"La víctima era menor de edad, quien se acercó a denunciar los hechos con fecha 1 de julio de 2018 en la oficina de denuncias del Arzobispado de Santiago", añadió la Fiscalía.
Fiscal Arias: Imputado se aprovechó de la confianza de menores y sus familias
Según planteó el fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, el mínimo que arriesga el imputado son 10 años de presidio.
Además, acusó que el sacerdote se aprovechó de la inexperiencia sexual de las víctimas y de la confianza de ellos y sus familias, considerando que en algunos casos era guía espiritual y, en otros, tío de los menores que muchas veces estaban bajo su cuidado. Los casos presentados datan desde el 2003.
"No es menor que se hayan cometido los delitos al interior de la Iglesia, al interior de casas parroquiales", agregó Arias.
El fiscal también apuntó al rol de Muñoz en el arzobispado de Santiago.
"Esta persona, además, conocía cómo se manejaba el sistema de investigaciones canónicas al interior de la Iglesia Católica, el sistema de investigación penal de abusos sexuales contra menores tenía enquistado en su interior, en un rol trascendente que era el de canciller, que hasta antes de 2011 conocía todas las denuncias de delitos sexuales en un primer momento, que con posterioridad por él también pasaban", dijo Arias.
A su vez, al conocer el robo que sufrió la Fundación para la Confianza, organización que apoya víctimas de abuso sexual infantil encabezada por José Andrés Murillo, el fiscal Arias dijo que pedirá detalles a Santiago para ver si el hecho afecta a los casos que está investigando.
Defensor: El sacerdote está tranquilo
En tanto, según el abogado defensor, Gabriel Henríquez, no cuentan todavía con la información completa y dijo que al menos hay dos casos prescritos.
"El sacerdote, en general, está tranquilo desde la perspectiva de que por fin podemos ya enfrentar esta situación, que hay una carga emocional no menor, un sinnúmero de emociones que además se han prolongado por mucho tiempo", sostuvo el abogado.
"Si no tengo los antecedentes, porque son nuevos, nos enteramos hoy, parece no de lógica discutir la medida cautelar", concluyó.
"Se formalizaron cinco hechos. Por lo menos tres no están dentro de lo que nosotros pensábamos. Y también nos ha sorprendido porque, desde el punto de vista jurídico, nos parece que al menos dos de los hechos formalizados, están claramente prescritos", añadió.
El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, a través de un comunicado, negó haber tenido conocimiento de los antecedentes de casos de abusos sexuales por los que se autodenunció Óscar Muñoz.