La defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, se refirió al informe del Ministerio de Desarrollo Social que señaló que al menos 547 niños se encuentran viviendo en la calle en el país.
En conversación con El Diario de Cooperativa, la abogada sostuvo que esta problemática se debe abordar con medidas tanto de corto como de largo plazo, aunque lo primero es sacarlos de la calle.
"Resulta evidente que un país y un Estado como el chileno no puede sino hacerse cargo de sacar a esos niños de la calle ya y eso implica un trabajo directo con ellos, pero también con sus contextos familiares y sociales", dijo Muñoz.
"Cuando uno observa el estudio, las causas por las cuales ellos llegan a la calle en primer término está aquello que se relaciona con problemas que se suscitan al interior de sus familias, donde probablemente están sufriendo de vulneraciones de derecho y son situaciones que han implicado el paso y el tránsito por algún organismo del Estado sin que hayan encontrado una respuesta", lamentó la defensora de la Niñez.
Asimismo, planteó que pese a las medidas de corto y largo plazo, las acciones son urgentes.
"Este es un llamado de atención muy evidente, pero también muy urgente, que es un tema que como Defensoría nos interesa insistir en destacar. Creemos que los tiempos del Estado no son los tiempos de los niños y los niños requieren respuestas urgentes y no mediando espacios de tiempo que no responden a sus necesidades", aseveró.
Además resaltó que muchos de los menores que están en la calle pasaron por alguna residencia del Sename.
"Muchos de esos niños han huido de residencias del Sename precisamente porque en esos lugares en vez de encontrar aquello a lo que se mandata al Estado, que es brindarles protección, lo que han encontrado son violencia, agresiones sexuales, agresiones físicas y otros comportamientos inaceptables que dan cuenta y demuestran por cierto aquello que el comité ya relevó respecto de las violaciones graves y sistemáticas a los derechos humanos de esos niños al interior de esa institución", enfatizó.