Antes de asumir como directora nacional del Servicio Nacional de Menores (Sename) a mediados de julio, Solange Huerta estuvo ocho años al frente de la Fiscalía Metropolitana Occidente, una de las más grandes del país.
En ese cargo Huerta presenta bajas cifras de condenas en casos por delitos sexuales contra menores con relación a sus pares.
En 2015, el último al mando de la mencionada Fiscalía, la ex persecutora regional optó por enviar a archivo o decretar decisión de no perseverar en 1.000 casos de delitos sexuales contra menores, un 70,2 por ciento de las causas que tuvo que indagar, cifra superior al promedio nacional de las Fiscalías del país, que es de 63 por ciento, según publicó La Tercera.
En tanto, Huerta decidió no perseverar con la investigación en el 14,3 por ciento de los casos de abusos a menores (205 casos), superando a todos los fiscales a nivel nacional y donde la media llega al 8,9 por ciento.
Esto genera controversia, ya que la decisión de no perseverar es una facultad de los fiscales que les permite decretar el fin administrativo de la causa, cerrando los casos antes o después de la formalización.
A diferencia del archivo de la causa, que es una salida administrativa cuando el caso no ha sido conocido por un juez, la decisión de no perseverar es el cierre de un caso aun cuando haya querella y esté judicializado, decisión que no es apelable por parte de las víctimas.
Respecto a sus ocho años al frente de la Fiscalía Occidente, Solange Huerta también registró peores índices que el promedio nacional en casos de delitos sexuales contra menores, en materia de archivo, salidas no judiciales e índice de condenas.
La nueva directora del Sename, durante toda su gestión, cerró un 69,1 por ciento de sus casos (7.531) enviándolos a archivarse o decretando no perseverar en la investigación. Es la quinta fiscal con más alto índice en salidas no judiciales, mientras que el promedio nacional es de un 64,7 por ciento.
En materia de condenas, durante todo su período registró un 11,4 por ciento de sentencias (1.251), el cuarto índice más bajo entre las fiscalías, donde el promedio nacional de condenas es de un 14 por ciento.
