Corte negó libertad provisional a militares uruguayos encausados en el caso Berríos
Los oficiales Tomás Casella, Wellington Sarli y Eduardo Radaelli deberán seguir recluidos, determinó por unanimidad la Octava Sala del tribunal de alzada.
Los oficiales Tomás Casella, Wellington Sarli y Eduardo Radaelli deberán seguir recluidos, determinó por unanimidad la Octava Sala del tribunal de alzada.
La Corte de Apelaciones de Santiago rechazó conceder la libertad provisional a los tres militares uruguayos extraditados a Chile, por su implicación en la muerte del químico Eugenio Berríos, ex agente de los servicios de seguridad de la dictadura de Augusto Pinochet.
La resolución, adoptada por la unanimidad de los miembros de la Octava Sala del tribunal, confirmó la decisión de primera instancia del juez Alejandro Madrid.
El pasado 23 de junio, el magistrado rechazó la excarcelación del coronel retirado Tomás Casella y los coroneles en servicio activo Wellington Sarli y Eduardo Radaelli, por considerar que constituyen "un peligro para la sociedad".
Los tres uruguayos, que permanecen recluidos en recintos militares chilenos, fueron procesados por Madrid por el delito de asociación ilícita para el secuestro de Berríos en 1991.
El abogado Carlos Portales alegó por la libertad de los imputados, mientras que por los querellantes lo hicieron Luppi Aguirre, del Consejo de Defensa del Estado (CDE), Alejandro Varela y Sergio Corvalán.
Los militares uruguayos fueron extraditados a mediados de abril pasado a Chile a petición del juez Madrid, para determinar su participación en la muerte de Berríos, quien fue agente de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA).
Berríos fue sacado de Chile en 1991 en un operativo conjunto de militares de ambos países, para evitar que declarase en el proceso por el asesinato en 1976 en Washington del ex canciller Orlando Letelier.
El químico chileno fue visto por última vez en noviembre de 1992 en Uruguay, cuando se presentó en una comisaría para denunciar que estaba secuestrado, pero fue entregado a unos militares y no se supo más de su paradero hasta abril de 1995, cuando se encontró su cadáver, atado y con disparos en el cráneo, en una playa.
En Chile están procesados como autores del secuestro y homicidio de Berríos los ex mayores de Ejército Arturo Silva Valdés y Jaime Torres Gacitúa.
También están procesados, por obstrucción a la Justicia y asociación ilícita, los generales retirados Hernán Ramírez Rurange y Eugenio Covarrubias, ambos ex jefes de la Dirección de Inteligencia del Ejército (DINE), al tiempo que se investiga la participación del ex dictador Pinochet en la planificación del homicidio.
En el caso Berríos también se indaga la responsabilidad del químico en el presunto asesinato del ex Presidente Eduardo Frei Montalva, quien pereció en una clínica privada en 1982, a raíz de una septicemia tras una operación.
La tesis de la familia es que Eugenio Berríos facilitó un microorganismo que fue hecho llegar al organismo de Frei, a través de médicos adscritos a la DINA que trabajaban en la Clínica Santa María. (EFE)