Javier Jara y Gaspar Calderón renunciaron a su representación.
El segundo juicio contra el sujeto, imputado por violaciones y abusos sexuales, está agendado para el 30 de marzo. El primero se anuló por culpa de un juez asiduo a las redes sociales.
Martín Pradenas, imputado por dos delitos de violación y cinco abusos sexuales, se quedó sin defensores a dos semanas del inicio de su segundo juicio oral.
Los abogados Javier Jara Müller y Gaspar Calderón, los últimos que componían el equipo jurídico, renunciaron a continuar con su representación.
Por ello, se está realizando una audiencia para coordinar cómo sigue el proceso, en la que se determinó, en primera instancia, que la defensoría regional le facilitará dos abogados para el juicio del jueves 30 de marzo, como estaba programado.
Marcelo Pizarro, jefe de Estudios de la Defensoría Pública de Temuco y uno de los nuevos representantes, detalló que "vamos a tener una conversación con don Martín Pradenas, para determinar las líneas a seguir y analizar qué es lo que va a transcurrir y pasar en la audiencia. Es necesario dar cuenta, por cierto, que la defensoría tiene la representación de toda persona hasta la completa ejecución de la sentencia".
En cuanto a eventuales castigos para los abogados, el fiscal de la causa Miguel Rojas señaló que en la audiencia de este jueves "se determinó que los defensores que renunciaron, con la inminencia que es sabida por todos, debían informar las razones de ello para poder determinar la posible aplicación de sanciones, que constituyen una supresión en el ejercicio de la profesión".
El persecutor admitió que "es una de las posibilidades" que este cambio altere los plazos del juicio, "lo cual lamentaríamos en sobremanera, en atención a que este tipo de situaciones revictimiza a cada una de las víctimas y sus familias".
En diciembre la Corte Suprema decidió anular el primer juicio contra Pradenas, en el que fue sentenciado a 20 años de cárcel, acogiendo un recurso de nulidad que presentó su defensa debido a la falta de imparcialidad de uno de los magistrados, Leonel Torres Labbé, antes y después que se diera a conocer la condena.
