"No tengo nada que agregar y estoy muy tranquilo", fue la escueta respuesta del candidato presidencial.
Enríquez-Ominami llegó hasta el Servel para inscribir a mil nuevos jóvenes en el Partido Progresista.
El candidato presidencial del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami, evitó referirse al viaje de los fiscales Jorge Abbott y Ximena Chong a Brasil en el marco del caso OAS, donde es investigado por presuntos delitos tributarios, fraude a las subvenciones electorales e infracciones a la Ley de Donaciones.
Enríquez-Ominami es indagado por el uso de un jet privado de la compañía brasileña, lo que fue reconocido por un ex director de la firma.
Ante las consultas de la prensa, que también apuntó a una posible investigación a la campaña de la Presidenta Michelle Bachelet, el ex diputado sólo se limitó a responder "no tengo nada que agregar y estoy muy tranquilo".
Refichaje
El ex parlamentario llegó hasta el Servicio Electoral (Servel) para inscribir a mil nuevos jóvenes en el Partido Progresista, con lo que la colectividad suma 19 mil militantes, lo que supera la meta fijada para el proceso de refichaje.
Sobre la posibilidad que se extienda el plazo para que los partidos puedan alcanzar la cifra de 18 mil militantes exigida por el Servel, el aspirante a La Moneda pidió "exigirle a los partidos tradicionales que no sigan faltándole el respeto a los chilenos. No pidan beneficios si ustedes mismos fijaron estas reglas".
"Dicen que las reglas son draconianas: draconiano es lo que viven los chilenos cuando tienen que pagar los intereses del banco, es un abuso total de esta 'pitutocracia', de esta 'mafiocracia', de esta 'partidocracia'. Son abusadores. Para ellos están dispuestos a cambiar las reglas y reajustarse los sueldos mil veces, para los chilenos que quieren cambiar Chile todas las dificultades", remarcó.
