El abogado Luis Hermosilla -que se encuentra en prisión preventiva por su imputación en el caso audios- presentó una denuncia al Ministerio Público por la filtración de los chats de su teléfono, debido a que la revelación de algunos mensajes, según sostiene, no guarda relación con la causa en la que está siendo investigado.
De acuerdo con La Tercera, la acción judicial fue ingresada el lunes por su hermano Juan Pablo Hermosilla y apunta a tres fiscales regionales: Lorena Parra (Oriente), Mario Carrera (Arica) y Carmen Gloria Wittwer (Los Lagos), quienes encabezan las investigaciones de las aristas vinculadas al mencionado caso.
Asimismo, va dirigida a todos los funcionarios de la Fiscalía Nacional que han tenido acceso a la información.
El documento de 25 páginas argumenta que, desde que Hermosilla entregó su teléfono al resguardo del Ministerio Público, se han conocido los chats que mantenía con el exfiscal Manuel Guerra; los ministros de la Corte Suprema Ángela Vivanco y Jean Pierre Matus; y el fiscal Carlos Palma.
Por lo tanto, según la defensa del jurista, estas filtraciones -que han sido publicadas en la prensa, lo que ha dado pie a nuevas indagaciones- son una demostración de que el ente persecutor ha infringido su deber.
En esta línea, el escrito también asegura que Lorena Parra se había comprometido junto con su equipo a resguardar la información y a centrar su investigación en los chats relacionados al caso audios, porque la autorización judicial solicitada por los persecutores -apunta- era únicamente para ese caso.
UN "MANDATO AMPLIO" DE HERMANO A HERMANO
Según el medio citado, el trámite obedece a un "mandato amplio" que el imputado letrado hizo a su hermano y también abogado Juan Pablo Hermosilla, que presuntamente incluye, además, la presentación de una querella contra la Fiscalía.
La razón es que dicho órgano y sus funcionarios -sostienen- perpetraron los delitos de revelación de secreto y obstrucción a la justicia, por lo que piden penas de cárcel efectiva.
Desde el ente persecutor confirmaron que se recibió la denuncia -mas no la querella-, pero aún no se ha asignado a un fiscal a cargo de la indagatoria.