El ministro en visita Mario Carroza comunicó este lunes su decisión de imponer dos penas de 15 años de presidio a Mauricio Hernández Norambuena, el ex frentista condenado por el asesinato de Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards, que el pasado 20 de agosto fue extraditado a Chile desde Brasil.
Carroza determinó 15 años de presidio por el homicidio del senador Guzmán y otros 15 por el secuestro de Edwards del Río, dando cumplimiento así al acuerdo de extradición que obligaba a Chile a reducir las condenas antiguamente dictadas.
El magistrado rechazó, sin embargo, la solicitud de la defensa del "comandante Ramiro" de restarle de la condena los 16 años que pasó preso en ese país, sentenciado en 2003 por el secuestro del publicista Washington Olivetto, pero sí le abonó un total de 1.256 días, equivalente a más de tres años.
Esto corresponde a los tres años y cuatro meses que alcanzó a cumplir tras las rejas en la Cárcel de Alta Seguridad, antes de la famosa fuga (1.244 días entre el 5 de agosto de 1993 y el 30 de diciembre de 1996); y a otros 12 días correspondientes al período en que se tramitó su extradición; entre el 8 al 19 de agosto recién pasados.
De este modo, el ex subversivo estará tras las rejas por alrededor de 26 años y ocho meses: hasta el año 2046.
Obligación "ineludible"
Al momento de la famosa "fuga del siglo", Hernández purgaba dos cadenas perpetuas: una en calidad de autor inductor del delito de atentado contra autoridad política con resultado de muerte del senador UDI Jaime Guzmán (crimen ocurrido el 1 de abril de 1991), y otra como autor de los delitos de asociación ilícita terrorista, en calidad de jefe, y autor del delito de secuestro terrorista de Cristián Edwards (entre el 9 de septiembre de 1991 y el 1 de enero de 1992).
No obstante, las tratativas recientes entre los gobiernos obligaron a Chile a garantizar, conforme a un tratado del Mercosur del año 2012, que -en caso de ejecutarse la extradición-, "Ramiro" no recibiría una pena superior a la dictada por el sistema legal brasileño.
De aquí que el ministro de Justicia, Hernán Larraín, adelantara que el ex frentista cumpliría una sentencia de 27 años, lo que le valió críticas por una supuesta "intromisión" en la labor de Carroza y le hizo aclarar que la decisión final correspondía al magistrado.
"Derivado de lo anterior, al concederle la República Federal de Brasil a Mauricio Hernández Norambuena su libertad anticipada y ponerlo a disposición del Estado de Chile el día 19 de agosto de 2019, dio cumplimiento así a la obligación internacional contraída con Chile, lo que definitivamente hizo que fuera ineludible que nuestro país dispusiera de lo necesario para dar cumplimiento al acuerdo internacional adoptado con la República de Brasil, incumbiendo en ese caso que el órgano jurisdiccional del Estado de Chile, adoptara las medidas que fueren necesarias y en definitiva, determinare el quantum de la pena aplicable", señala la sentencia del ministro Carroza (ver archivo adjunto).
"Este ministro instructor al resolverlo así, al estar comprometida la voluntad del Estado internacionalmente, ha estimado que para estos efectos, se encuentra amparado en la idea de la obligatoriedad del principio de convencionalidad", expone Carroza.
Mario Carroza, ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Santiago y postulante a la Corte Suprema. (Foto: ATON)
Defensa suspicaz
El juez Mario Carroza se encuentra actualmente en una quina de postulantes para ingresar como ministros a la Corte Suprema. Este elemento fue resaltado por la defensa de "Ramiro", que mostró suspicacias ante la posibilidad de que el magistrado hubiera obrado de este modo para no enemistarse con el Poder Ejecutivo, que toma parte relevante en el nombramiento de los nuevos integrantes del máximo tribunal.
"Resulta sorprendente la correspondencia que tiene esta sentencia del ministro Carroza con lo que había planteado el ministro de Justicia, Hernán Larraín", dijo el abogado Alberto Espinoza.
El jurista dijo que su sentimiento es "de decepción": señaló que "resulta decepcionante el fallo del ministro Carroza".
"Obviamente, no compartimos los planteamientos que él sostiene en esta sentencia, de manera que haremos uso de los recursos legales para impugnar esta resolución porque, naturalmente, causa un agravio, un gravamen irreparable", dijo Espinoza.
El profesional añadió que "este es un fallo de primera instancia, lo vamos a impugnar por la vía del recurso de apelación y esperamos que este fallo sea revocado por las instancias superiores y si es necesario llegaremos hasta la Corte Suprema"
Espinoza concluyó que "esta coincidencia que se da entre el ministro de Justicia públicamente y que nosotros lo calificamos como un acto de intromisión en cuestiones que son propias de un poder independiente como es el Poder Judicial y ahora parece que el ministro Carroza falla prácticamente en los mismos términos que planteó el ministro Larraín".
