Raúl Julio Escobar Poblete, ex miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez que acaba de ser extraditado desde México a Chile, es "el más frío de todos los que participaron", en abril de 1991, en el crimen del senador Jaime Guzmán, dijo a Cooperativa la periodista Lilian Olivares, autora del libro "Asesinato en el Campus Oriente". La profesional explicó en Una Nueva Mañana que Escobar -alias "comandante Emilio"- fue quien "organizó la forma en que lo iban a matar" a su salida de dictar clases en la Universidad Católica, y recordó que, a diferencia de Ricardo Palma Salamanca (el otro autor material del asesinato), no pudo ser arrestado por la policía. Sólo 11 años más tarde, cuando Mauricio Hernández Norambuena fue detenido en Brasil, en 2002, por el secuestro del publicista Washington Olivetto, Escobar estuvo "a punto de caer", pero no sucedió. "Emilio" fue también quien planificó la fuga de los frentistas desde la Cárcel de Alta de Seguridad en 1996 -elevándose a un estatus de "héroe" entre los subversivos que aún actuaban en la época de la transición-, y sólo en 2017 fue arrestado en San Miguel de Allende, en México, donde se dedicaba al secuestro y a la extorsión. En cierto sentido, comentó Lilian Olivares, "es el eterno fugitivo de esta historia", y su comparecencia ante la justicia chilena, para responder por el crimen del fundador de la UDI, "cierra este capítulo", más allá de que todos sus detalles principales ya son conocidos y han sido establecidos.