Mientras la defensa asegura que se deben agotar todas las instancias judiciales antes de llevar al senador hasta la cárcel, en el Ministerio Público esperan que esté tras las rejas de inmediato.
El cumplimiento efectivo de la condena a cinco años de cárcel confirmada por la justicia contra Jorge Lavandero Illanes centra la atención de las partes del juicio contra el senador por abuso sexual de menores.
La defensa del senador asegura que la sentencia no se puede ejecutar hasta que la Corte Suprema decida sobre el recurso de queja que presentará para impedir que su representado llegue hasta la cárcel.
Sin embargo, desde la parte querellante aseguran que el legislador desaforado ya está en condiciones de comenzar a llevar a cabo su condena. En tanto, Rodrigo Mena, abogado del Ministerio Público, indicó que van a tomar las medidas para que "a la brevedad posible" se ordene el "cúmplase" del fallo.
Luego de la decisión de la Corte de Apelaciones de Temuco de revocar el beneficio de libertad vigilada que la jueza Georgina Gutiérrez había dictado a favor de Lavandero, él podría cumplir la pena tanto en Temuco como en Santiago.
En la capital de la Novena Región, de hecho ya está habilitada una celda especial para condenados por delitos de connotación sexual, aislada del resto de la población penal de la Cárcel local, que alberga a medio millar de reclusos.
Dependiendo de la decisión del Tribunal de Garantía una vez que la sentencia quede ejecutoriada, su destino también podía estar en Santiago, en la Cárcel de Alta Seguridad (CAS).
Justamente en la capital del país es donde el senador desaforado se encuentra, específicamente en la comuna de Providencia.
Otra duda sobre el futuro de Lavandero tiene que ver con su cupo senatorial, que una vez que se dicte el cúmplase de la condena, quedará vacante. De acuerdo a la Carta Fundamental, el cargo lo asume su compañero de lista en la elección anterior, en este caso el radical Guillermo Vásquez.
Sin embargo, la reforma constitucional aprobada esta semana indica que el cupo queda en manos de su partido, la Democracia Cristiana (DC). Esto se haría efectivo sólo si va a la cárcel después que se promulguen los cambios, a fines de agosto próximo.
