Jorge Andrés Luchsinger Mackay, hijo mayor del matrimonio asesinado el año 2013 en su casa de Vilcún, reiteró este martes su lamento por el resultado del juicio que, el 25 de octubre, terminó con los 11 imputados absueltos.
Luchsinger y cinco de los acusados concurrieron hoy al Tribunal Oral en lo Penal de Temuco para escuchar la lectura del fallo absolutorio. A la salida, visiblemente afectado, el deudo afirmó que en este caso "primó la política por sobre las cosas técnicas".
"Yo creo que hubo mucha presión... Lo vimos de distintas entidades del Estado. Nosotros respondimos a eso, porque no nos parecía, y bueno; el resultado ya lo saben todos", agregó Jorge Luchsinger, quien espera "ver la acción a seguir con el abogado (Carlos Tenorio) una vez que lea el detalle del fallo".
En la sentencia el Tribunal decidió no condenar en costas a la familia, el Gobierno Regional o la Fiscalía, pues estimó que sí hubo méritos para presentar querella e iniciar investigación.
Francisca Linconao, una de las acusadas y posteriormente exculpadas en el proceso. (Foto: ATON)
Este punto fue considerado un triunfo por el vocero del Ministerio Público, Roberto Garrido, quien confirmó la intención de apelar el resultado.
"La convicción de la Fiscalía está intacta en cuanto a que había antecedentes para condenar. En razón de ello vamos a recurrir. El mismo tribunal reconoció en el veredicto que la declaración de José Peralino era válida, descartó que hubiera un montaje, presiones o malos tratos en su contra. Eso, además, lo reconoce al no condenar en costas a la Fiscalía, estimando que hay motivos plausibles para litigar y que, además, la Fiscalía no resultó totalmente vencida", dijo Garrido.
"Vamos a estudiar, a partir de ahora, la sentencia, para presentar los recursos correspondientes dentro del plazo legal", agregó.
Caso iglesias
En paralelo, durante esta jornada comenzó la preparación de juicio oral por el denominado "caso iglesias", que había sido postergada en cinco ocasiones.
En la ocasión se leyeron antecedentes de la eventual participación en la quema de un templo evangélico de Alfredo Tralcal y de los hermanos Pablo, Benito y Ariel Trangol Galindo, quienes permanecen en prisión preventiva.
Cabe recordar que este caso fue recalificado como incendio común y tres comuneros están en huelga de hambre. Ariel Trangol, de hecho, llegó hasta la audiencia en silla de ruedas.