El Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a 602 días de cárcel y al pago de multas por 2,6 millones de pesos a un joven de 19 años identificado como Bairon Arturo Pilquinao Lorca, quien participó del ataque que el 9 de junio de 2016 afectó al Templo de la Gratitud Nacional, ubicado en el centro de Santiago, en medio de una marcha estudiantil.
En el marco del juicio se dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que alrededor de las 13:15 horas de ese día "Bairon Arturo Pilquinao Lorca, en compañía de otros sujetos, ingresaron al templo de la Gratitud Nacional, ubicado en la intersección de Alameda Libertador Bernardo O'Higgins con Ricardo Cumming, en la comuna de Santiago, forzando y rompiendo una de las puertas laterales correspondiente al sector Sur del inmueble, que se encontraba cerrada, mediante golpes de pie".
Una vez en el interior, los asaltantes procedieron "a sacar y trasladar hacia la vía pública la imagen de un Cristo crucificado, el que luego de exhibir, destruyeron a golpes".
La acción de los encapuchados dejó la imagen religiosa en un estado lamentable. (Foto: ATON)
El tribunal condenó a Pilquinao a 541 días de presidio, a la pena accesoria de suspensión de cargo u oficio público durante el tiempo de la condena; más el pago de una multa de 50 unidades tributarias mensuales (equivalentes a 2,3 millones de pesos), en calidad de autor del delito consumado de daño a monumento nacional.
Además, se le impuso otra pena de 61 días de reclusión más el pago de una multa de seis unidades tributarias mensuales (280 mil pesos) y de las costas del proceso, como autor del delito consumado de ultraje a objeto de culto.
Si el muchacho no paga las multas impuestas se le revocará la remisión y terminará tras las rejas. (Foto: ATON)
La sentencia indica, sin embargo, que "por reunir el sentenciado los requisitos exigidos en el artículo 4° de la Ley 18.216, se le sustituyen las sanciones corporales por la remisión condicional de la pena, quedando sujeto a la vigilancia y órdenes de Gendarmería de Chile para su cumplimiento".
A la vez, se le concedió la opción de cancelar las multas en "doce cuotas iguales y sucesivas, comenzando el pago de la primera al mes siguiente en que esta sentencia quede ejecutoriada".
La resolución advierte que "si el sentenciado no pagare la multa descrita, se le impondrá como sustitutiva, la pena de reclusión" (ver archivo adjunto).
