La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos manifestó su "preocupación" por el caso de Óscar Pérez, el joven que fue atropellado y aplastado por un carro policial este viernes durante una manifestación en Plaza Baquedano.
Mediante un breve comunicado, la repartición para América del Sur de la oficina que dirige Michelle Bachelet, expresó su "preocupación por el caso del joven atropellado por un carro de Carabineros", ante lo cual alertó que "hechos recientes evidencian que casos de personas heridas en el marco de manifestaciones continúan ocurriendo".
En ese marco, hizo un llamado a las autoridades a "asegurar que las personas puedan ejercer su derecho de reunión pacífica, sin restricciones, autorizaciones previas ni riesgos para su integridad física y otros derechos humanos".
Asimismo, urgió a "asegurar de manera efectiva que las fuerzas del orden público sigan estrictamente las normas internacionales sobre el uso de la fuerza en todo momento".
El joven de 20 años está fuera de riesgo vital, pero sufrió cuatro fracturas en su pelvis.
En tanto que Mauricio Carrillo Castillo, el cabo de Carabineros que conducía el carro policial que lo atropelló fue formalizado este sábado en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago por cuasidelito de lesiones graves, y quedó con la medida cautelar de firma mensual.
Este hecho ha reflotado las exigencias de destitución del general director de Carabineros, Mario Rozas, por la actuación policial, entre ellas desde el Partido Socialista, que apuntó a la "directa responsablidad" del jefe de la institución, lo que hace "insostenible" su permanencia en el cargo.
HRW condenó la "brutalidad extrema"
En un sentido similar se manifestó el director de Human Rights Watch para América del Sur, José Miguel Vivanco, quien fustigó: "¿De qué sirven las charlas sobre DDHH que se dan los Carabineros si en la calle siguen actuando con brutalidad extrema?".
Ante ello, emplazó que "los autores materiales y los mandos a cargo de la operación, deben ser destituidos y sancionados penalmente. Si eso no ocurre y pronto, continuarán los abusos.
