Ad portas del tercer aniversario del estallido social, el exsubsecretario del Interior Rodrigo Ubilla (RN) dijo en Cooperativa que en dicha crisis operó "un movimiento violento, que tiene su origen en distintos grupos -anarquismo, violencia política- y el objetivo era desestabilizar la democracia sacando al Presidente Piñera del Gobierno". Para el hoy director del Área Política y Sociedad Civil de Libertad y Desarrollo, el 18-O se generó "una coordinación de aprovechamiento; una instrumentalización del malestar social para generar cuadros de violencia" a nivel nacional. La propia quema del Metro, aseguró, da cuenta de "una articulación", ya que estos hechos "no suceden casualmente". Por el contrario, reflejan la acción de "gente que pretendió generar efervescencia y violencia (...) con la intención de que el Presidente Piñera renunciara".