La nieve de la Cordillera de Los Andes se ha visto afectada por la contaminación y se está derritiendo más rápidamente, según arrojó un estudio realizado por seis instituciones nacionales.
Según publicó La Tercera, la medición fue realizada por las universidades de Santiago, de Chile, Católica, de Magallanes, Andrés Bello y el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (Ceaza).
Raúl Cordero, académico del Departamento de Física de la U. de Santiago, explicó que la contaminación por hollín causa que la nieve se vuelva más oscura y absorba mayor radiación, y que "cuando esto ocurre, la nieve se calienta y se derrite más rápidamente que la nieve pura que refleja (rebota) la radiación, derritiéndose más lento".
El estudio "Carbono Negro en la Criósfera Andina" se llevó a cabo en montañas en diversos puntos entre Putre y Osorno, donde se obtuvieron muestras de aproximadamente un kilo (equivalentes a dos litros), las que posteriormente fueron derretidas en un microondas.
El líquido obtenido fue filtrado y en base a su color se determinó el nivel de contaminación, arrojando mayores concentraciones en las zonas cercanas a Santiago y en el norte del país, en las inmediaciones de faenas mineras.
Las concentraciones de carbono negro en La Parva, Valle Nevado y el Cajón del Maipo superaron los 100 nanogramos de hollín por grano de nieve, indica el estudio, mientras que el resto de las zonas estuvieron cerca de los 20 nanogramos, cifra similar a las nieves de Alaska o el Ártico canadiense.
"El principal resultado de nuestro proyecto es que la contaminación no puede explicar por sí sola el retroceso de los glaciares ni la pérdida de cobertura de nieve observada en todos los Andes durante las últimas décadas. La pérdida de nieve y el retroceso de glaciares, son consecuencia de los devastadores efectos del cambio climático", añadió Cordero.