La Coordinadora Nacional de Inmigrantes pidió a la Presidenta Michelle Bachelet que antes del término de su Gobierno impulse un proceso de "regularización extraordinaria" de extranjeros que residen en Chile.
El presidente de la organización, Rodolfo Noriega, dijo a Cooperativa que, según sus cálculos, existe "una población de 200 mil extranjeros en situación irregular" en nuestro país.
"El Gobierno ha reconocido que existen 33 mil niños indocumentados, y si estimamos que hay dos adultos por cada niño hablaríamos de 100 mil (personas), pero ésos son los que tienen familia, y habría que duplicarlo o más por el número de quienes no tienen familia", explicó.
Este inmenso grupo está afecto a "una legislación no da cuenta de la realidad migratoria, que estanca en categorías de visas cerradas que no permiten a la gente tener residencia. Por otro lado, hay una serie de procedimientos administrativos que lo único que hacen es llevar a la irregularidad", afirmó el dirigente a El Diario de Cooperativa.
"Círculo vicioso"
Noriega comentó el caso de Sergio Hurtado Ponce, trabajador colombiano que murió en un accidente laboral mientras trabajaba en la construcción de la nueva casa de Alexis Sánchez.
"Estas situaciones existen porque los trabajadores migrantes están en situación irregular", afirmó, pero poniendo sobre la mesa que "de parte del empresariado hay un cuello de botella".
"¿Cómo contratar a un extranjero que está en situación irregular? ¿Y cómo se regulariza un extranjero que no tiene contrato de trabajo?... Existe un círculo vicioso. Por eso, frente a esa situación de emergencia provocada por estos cuellos de botella de la legislación, hay que tomar medidas extraordinarias", argumentó.
"Nosotros el día lunes llevamos a La Moneda 2.300 firmas pidiendo una regularización migratoria extraordinaria, y llevamos 300 cartas de extranjeros en situación irregular que piden a la Presidenta que les den una oportunidad para residir regularmente; que se atienda esta situación de emergencia y que el sistema que ha provocado estas irregularidades migratorias se haga cargo de corregirse, de enmendarse", planteó el activista.
"Esta realidad tenemos que afrontarla con medidas extraordinarias. Si no se hace, si no se toman estas medidas extraordinarias, van a seguir sucediendo, lamentablemente, casos como el que hemos visto de un trabajador inmigrante muerto. Eso le dijimos a la Presidenta: cada minuto es la posibilidad potencial de que ocurran este tipo de situaciones, que nadie quiere que ocurran", subrayó.
Medidas administrativas
Rodolfo Noriega reconoció que "el tema de la Ley (de Migración) va a ser para el próximo Gobierno", pero apuntó que Michelle Bachelet puede avanzar en el ámbito de "las medidas administrativas".
"La Presidenta dijo que iba a gobernar hasta el 11 de marzo, entonces ella puede decretar un proceso extraordinario de regularización migratoria, que es lo que le hemos planteado. Si no lo hace, va a generar, lamentablemente, situaciones de potenciales riesgos para la gente inmigrante", dijo.
Noriega finalizó recordando que "un proceso ordinario de una persona que ingresa regular al país puede demorar cinco a seis meses para obtener una residencia", y no se puede "pensar que en esos meses la persona va a estar esperando que le otorguen cédula de identidad para poder trabajar".
"No podemos hacer vista gorda frente a la realidad (...) La gente necesita subsistir", aseveró.