En prisión preventiva quedó Cristian Pinochet Contreras tras ser formalizado por los cargos de conducción en estado de ebriedad con resultado de muerte, luego de atropellar a la estudiante de derecho Constanza Lagos de 24 años, el fin de semana pasado en la comuna de Providencia.
Pinochet Contreras, de 29 años, se había dado a la fuga tras lo ocurrido en las inmediaciones de un local nocturno de avenida Manuel Montt, entregándose a la justicia solo días después.
Las declaraciones de testigos fueron clave en el inicio del proceso, ya que por ejemplo Michelle Beltrán, quien conoció al imputado sólo horas antes del hecho y que compartía en el BMW al momento del accidente, fue tajante en su versión como explicó la fiscal Silvia Olivares.
"Ella va sentada en el asiento del copiloto, le consta que el imputado había bebido esa noche, ellos se percatan del atropello e incluso parte del espejo cae en las piernas de ella y (Beltrán) se lo lanza", relató la persecutora.
"Él dice que no está ni ahí con irse preso, ella le grita le dice 'cuidado', no obstante eso, él continúa su marcha y sigue bebiendo", agregó la fiscal.
Dentro de los argumentos para solicitar la prisión preventiva se aludió a la necesidad de cautela y el riesgo de fuga de Pinochet Contreras.
Defensa: Son medidas abusivas
La medida de prisión preventiva así como las figuras invocadas por la Fiscalía y la parte querellante, fueron consideradas un exceso por parte del abogado de la defensa, Reiniero García de la Pastora.
"La dureza de la decisión va a significar que en nuestra legítima disconformidad deduzcamos una apelación, no creo que aquí exista un peligro para la seguridad de la sociedad y considerar eso como argumento lógico me parece irracional", alegó el jurista.
García de la Pastora sostuvo que aunque la decisión del tribunal es legítima, también lo es poder apelar a ella, especialmente si no hay pruebas acerca de la condición de ebriedad del conductor.
"Testigos valen tanto como una alcoholemia"
Por su parte el abogado querellante, Francisco Cox, indicó que la declaración de los testigos es sufiente prueba contra el imputado, ya que sus declaraciones "valen tanto como una alcoholemia".
"Hay testigos que son amigos de él: uno dice que bebió una cerveza, él mismo confiesa haber bebido dos champán y una tercera testigo dice que lo vio tomar dos whisky, es decir cinco tragos y después conduce, eso es estado de ebriedad", relató.
"La ley permite acreditar a través de testigos", añadió Francisco Cox, quien además recordó antecedentes del detenido por manejo bajo la influencia del alcohol el año pasado.
El tribunal fijó 45 días para la investigación del caso, tiempo en el cual Cristián Pinochet Contreras permanecerá recluido, arriesgando desde 61 días de presidio hasta 3 años más la suspensión de su licencia de conducir.