Entre los antecedentes entregados al Ministerio Público está lo presuntamente constatado en el cuestionario, con tres menores de edad víctimas de abusos sexuales fuera del recinto educativo.
Los padres y apoderados del recinto, en tanto, advierten que no es seguro que los alumnos regresen a clases.
La Seremi de Educación del Biobío, en representación del Gobierno, ha interpuesto formalmente una denuncia en el Ministerio Público por eventuales delitos sexuales ocurridos en la Escuela Villa Centinela Sur de Talcahuano ante la Fiscalía.
La seremi Elizabeth Chávez detalló que "se hizo un programa de salud sin el consentimiento de la familia, por lo tanto, eso para nosotros es importante (de indagar)", mientras qur también alertó sobre los resultados que arrojó el estudio.
"Nos enteramos con el paso de los días que tres niñas o niños al hacerse este procedimiento recordaron hechos de abuso sexual y nosotros también nos hacemos parte en esta denuncia de esas dos acciones: una, la del procedimiento de salud sin el consentimiento de la familia y, además, de la situación que mencioné", analizó la autoridad.
Los hechos detallados por el Ejecutivo dan cuenta de la aplicación de la ficha CLAP en el recinto educativo, llevada a cabo sin la autorización o consentimiento de los apoderados.
Entre los antecedentes que la autoridad central entrega al Ministerio Público está un hecho presuntamente constatado en el cuestionario, con tres menores de edad que fueron víctimas de abusos sexuales afuera del colegio.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, reaccionó a esta situación y señaló que "eso es objeto de la máxima preocupación, los establecimientos educacionales son lugares de protección para niños y niñas, no pueden ser lugares de riesgo menos aún de abuso y, de consecuencia, el Gobierno va a actuar en todas áreas, sectores que tienen algo que decir aquí, con la máxima fuerza para reaccionar a lo sucedido y prevenir que no se repita".
Por su parte, los padres y apoderados de estos niños han manifestado su desconfianza y un quiebre con el establecimiento educacional, por lo que, pese a que para el lunes está programado el regreso a clases, adelantan que nada garantiza que la matrícula total de casi 300 niños vuelva a asistir.
"A él le hicieron preguntas que no van al caso de un niño de diez años. Por ejemplo, a mi hijo le preguntaron si fumaba marihuana -tiene diez años-, que si bebía alcohol, que si ha tenido relaciones sexuales y que si ha tocado a niñas. No tenían por qué haberle preguntado esas cosas a mi hijo", acusó una de las apoderadas de este colegio.
Mientras que en otro testimonio, la tía de una de las niñas que asiste al recinto advirtió que su sobrina no quiere regresar a clases y adelantó que llegará "hasta las últimas, porque aquí hay responsable en esto".
