El próximo miércoles 28 de septiembre se dará a conocer la sentencia que recibirá Vanessa Trigari, mujer que enfrentó un juicio acusada del homicidio calificado de su hijastro de sólo cuatro años, Ángel Márquez, y que ayer viernes fue declarada culpable del crimen.
El crimen ocurrió en agosto de 2015 y provocó gran impacto a nivel nacional, debido a que el cadáver del niño fue hallado en pijama, envuelto con una toalla, al interior de una bolsa de basura en un sitio eriazo cercano al estadio municipal de Molina.
La fiscal Mónica Barrientos destacó que en el marco del juicio, que duró dos semanas, se probó que Trigari planificó el asesinato del menor y que obligó a sus otros hijos, mediante "manipulación", a no decir nada.
"Esta manipulación fue para poder ocultar los efectos de este ilícito y se refiere también al hecho de que ella tiene un control respecto de los menores", explicó la persecutora.
En el juicio, además, se comprobaron los reiterados maltratos de los que Ángel Márquez fue víctima, que incluyeron desnutrición y tres fracturas.
Defensor: "No hubo imparcialidad"
Sin embargo, para el abogado defensor, Esteban Arévalos, no hubo objetividad en las pruebas presentadas en las audiencias.
"Hemos escuchado a peritos, hemos escuchado a testigos que en realidad declaran sobre informes periciales (...) No hay una imparcialidad en cuanto a las conclusiones, porque quién puede ser imparcial si, en definitiva, lo que hace es revisar su propio trabajo y decir que está perfecto", alegó.