La Policía de Investigaciones (PDI) realizó este miércoles una fiscalización migratoria a vendedores ambulantes que se encuentran en el barrio Meiggs.
Este operativo policial se enmarca en el plan impulsado por el Gobierno en materia de seguridad en este histórico barrio comercial de la capital, destacando entre sus puntos de trabajo precisamente un aumento en las fiscalizaciones de diversos servicios públicos.
Durante el procedimiento de esta jornada, los detectives lograron fiscalizar a más de 200 personas en el sector, siendo detectados 35 migrantes que mantenían una situación irregular en el país.
"Cuando uno detecta a un extranjero de manera regular, tiene que dar cuenta -en este caso- al Servicio Nacional de Migraciones, que adopta las medidas que les corresponden", detalló el subcomisario Fernando Toro, del Departamento de Policía Internacional de la PDI, quien también advirtió que la mayoría de las infracciones a la Ley de Extranjería son porque "entraron irregularmente a nuestro país".
Sobre este procedimiento, el funcionario policial explicó que "una vez que son fiscalizados y son denunciados, se les entrega una tarjeta de infractor y ellos están a la espera de la medida que adopte la justicia administrativa, esto puede ir de distintas sanciones e incluso puede llegar a la expulsión del país, si así lo determina la autoridad".
A esta fiscalización se suman otros procedimientos que lidera Carabineros, entre ellos el retirar a comerciantes ambulantes desde las estaciones de Metro, una situación que es denunciada de forma constante por los usuarios del transporte subterráneo metropolitano.
El barrio Meiggs se encuentra afectado por el comercio ambulante y graves hechos de violencia, como el registrado en el Día del Trabajador donde la reportera Francisca Sandoval falleció tras recibir un disparo en el rostro mientras cubría las protestas.