La diputada presentó un recurso para revertir su desafuero, a raíz de la querella presentada por la senadora, luego de que la acusara de mentir sobre su ceguera.
El pleno del máximo tribunal definirá su futuro el próximo 7 de agosto.
La diputada María Luisa Cordero recurrió a la Corte Suprema para revertir el desafuero que decretó en su contra la Corte de Apelaciones de Santiago, a raíz de la querella por injurias graves con publicidad presentada por la senadora Fabiola Campillai, quien la acusó de mentir sobre su ceguera, causada por una bomba lacrimógena que un carabinero lanzó durante las protestas de 2019.
A través de sus abogados, la psiquiatra y parlamentaria independiente -que integra la bancada de Renovación Nacional- ingresó un recurso de apelación ante el máximo tribunal en la que sostiene no hay un procedimiento penal que habilite el desafuero, no existe mérito para que se configure el delito de injurias graves y que se estaría conculcando la libertad de expresión.
Según publicó La Tercera PM, en la reclamación de 22 carillas, la defensa de Cordero argumenta que no se le puede encausar por haber replicado lo que terceros habían manifestado.
"De las expresiones de la aludida diputada queda en evidencia que sus dichos están inspirados en un animus narrandi, esto es, en su intención de relatar hechos, lo que sucede al hacerse eco la diputada señora Cordero de lo que leyó en redes sociales", dice el documento.
"Para que se configure este ilícito no basta que las expresiones proferidas sean mortificantes u ofensivas para una persona determinada, sino que es menester que vayan directamente encaminadas a deshonrarla, menospreciarla o desacreditarla, lo que en la especie ha de descartarse, según se ha señalado, por aquello del animus narrandi que desplaza el animus injuriandi", agrega el texto.
El pleno de la Suprema revisará el recurso de Cordero el próximo 7 de agosto.
En octubre, un tribunal condenó a 12 años y 183 días de prisión al excapitán Carabineros Patricio Maturana, por considerarlo culpable de disparar una bomba de gas lacrimógeno contra Campillai.
Los dichos de Cordero contra la senadora independiente, la más votada en las elecciones a la Cámara Alta, desataron un rechazo transversal de representantes y fuerzas políticas, incluido el Presidente Gabriel Boric.
