Marisol Turres (UDI) y Cristián Campos (PPD) destacaron que los dineros facilitados fueron descontados de sus dietas.
Claudio Arriagada (DC) admitió no haber ponderado la "dimensión ética" del asunto.
El presidente de la Cámara Baja, Marco Antonio Núñez, reconoció que en este caso operaba un "privilegio inexplicable" para los congresistas.
Una auditoría externa realizada al ejercicio contable 2014 de la Cámara de Diputados reveló que seis parlamentarios accedieron ese año a "préstamos" de la Corporación cuya restitución, realizada hasta en 28 cuotas, no consideró intereses ni reajustes.
La información publicada temprano por el diario El Mercurio motivó un pronunciamiento matinal del presidente de la Cámara Baja, Marco Antonio Núñez (PPD), quien explicó que la modalidad se arrastraba desde la década de 1990 y operaba sobre la base de "adelantos" de las dietas, pero que en 2015 fue suspendida.
Núñez admitió que se trataba de "privilegios inexplicables", pero apelando a la "privacidad" de los involucrados, evitó dar a conocer sus nombres. Éstos, sin embargo, trascendieron durante la tarde y varios de ellos salieron a hacer sus descargos.
"Use, pero no abuse"
Así, se supo que Marisol Turres (UDI) y Claudio Arriagada (DC) pidieron "adelantos" por seis millones de pesos, Diego Paulsen (RN) por 12 millones, Jenny Álvarez (PS) por 18, Jaime Pilowsky (DC) por 25 y Cristián Campos (PPD) por 32 millones de pesos, todos los cuales ya fueron restituidos.
"Atendida una situación puntual muy compleja económicamente, yo pedí un anticipo que ascendió a menos de lo que es mi sueldo, y me fue descontado después en unas cuotas de mi sueldo en los meses siguientes. Creo que fueron seis cuotas, una cosa así", explicó Marisol Turres al ser consultada por periodistas en el Congreso.
"Yo no usaría la palabra préstamo, usaría como un anticipo de tu sueldo, que muchas personas lo hacen en muchos lugares donde trabajan. A veces se realiza eso", agregó la parlamentaria gremialista, antes de acotar: "Yo creo mucho en el 'use, pero no abuse'".
El diputado Cristián Campos señaló, en tanto, al diario La Segunda, que solicitó "un adelanto" de su dieta "por una situación coyunturalde tipo familiar".
"Lo cancelé en los meses posteriores. Fue un tema familiar delicado", explicó el legislador, quien destacó que se trataba de "atribución que estaba ahí desde el regreso de la democracia".
"Si hubiera sabido que podría ser cuestionado, hubiera buscado otro mecanismo. Jamás pensé que esto podría ser cuestionado. Lo que me explicaron era que estaba recibiendo un adelanto de mi dieta", dijo el PPD al vespertino.
"Un error"
El diputado DC Claudio Arriagada admitió también en la Cámara que había cometido "un error" en este caso, pero aseguró que en el momento no vio un conflicto ético en el asunto.
"Informado de que existía esa posibilidad, hice uso de eso, obviando trámites y cosas. Debo reconocer que en ese momento no medí la dimensión ética que, hoy día, asumo que tiene", dijo Arriagada, apelando al principio de "la igualdad de trato".
"No tiene otra connotación y yo asumo que es un error, lo lamento mucho y asumo la responsabilidad. Lo que menos me interesa es ser parte de un sistema de ningún privilegio en la Cámara de Diputados", aseveró el ex alcalde.
"Salvó a su padre"
Hasta ahora no se conoce reacción de la diputada socialista Jenny Álvarez, pero sí salió en su defensa, a través de Twitter, el también diputado PS Fidel Espinoza.
Si supieran pq @jennyalvarezv pidió adelanto al congreso se morirían de verguenza los "pequeños" q han criticado. Salvó la vida de su padre.
— Fidel Espinoza (@fideldiputado) enero 5, 2016