Este martes la Comisión de Régimen Interno inició la votación de la propuesta de la mesa de la Cámara de Diputados para establecer un nuevo reglamento, el cual terminará con los privilegios de los parlamentarios.
Si bien por años hubo beneficios que con el tiempo ya se terminaron, como dos entradas permanentes a la tribuna oficial del Estadio Nacional y la acumulación de millas por los viajes con fines parlamentarios, para después usarlas con fines personales. Ahora se busca poner freno a otras situaciones que estiman que no son compatibles con las leyes de probidad y transparencia.
Marco Antonio Núñez (PPD), presidente de la Cámara Baja, manifestó que hay consenso par apoyar esta iniciativa.
"Aquí hay un instrumento concreto, es el estatuto parlamentario, invitar a la Corte Suprema y a todas las instituciones del Estado a poder tomar decisión concreta en aquellos temas que no se han definido que están en una área gris respecto a probidad, transparencia y acceso a la información", planteó Núñez.
"De que exista algún cambio en algún artículo del reglamento que regula el funcionamiento de la Cámara, lo vamos a adecuar durante las próximas semanas", agregó el diputado.
Cambios en el senado
Por su parte el presidente del Senado, Patricio Walker (DC), destacó que después de 204 años por primera vez se hizo una cuenta pública de parte del Congreso, ocasión en que se comprometieron a sacar las seis leyes de probidad y transparencia, lo que efectivamente ocurrió en la práctica después.
Indicó también que se anunciaron medidas internas para modificar la ley orgánica del funcionamiento del Congreso. El senador, adelantó que vienen cambios que detallará el martes 15 cuando deje el cargo.
"Voy a dar cuenta de cómo se implementaron esas medidas que son más radicales que las que está proponiendo la Cámara de Diputados. Muchos se van a llevar una sorpresa importante cuando el 15 de marzo de a conocer pormenorizadamente todas las medidas", afirmó Walker.
"Medidas de autoridad, de reducción de gastos, de eliminación de privilegios, de fortalecimiento a la comisión de ética, obligaciones adicionales que van a tener los parlamentarios para que efectivamente hallamos aprovechado esta crisis de confianza como una oportunidad para hacer cambios radicales y que duelan", añadió el parlamentario.
El timonel de la UDI, Hernán Larraín, manifestó que el Senado y la Cámara de Diputados deberían actuar conjuntamente y bajo las mismas reglas.
"El Senado y la Cámara debieran actuar de forma conjunta. De hecho yo presido la comisión bicameral de transparencia en el Senado y lo que procuramos es homogeneizar las normas que en estas materias existen en ambas cámaras", dijo el parlamentario gremialista.
"Espero que más allá de su contenido esto sea discutido y resuelto de manera común por ambas cámaras, porque sería muy extraño que una cámara tuviera ciertas reglas de comportamiento y otra tuviera otras distintas", agregó Larraín.
Con respecto a las horas de trabajo de los parlamentarios, que han sido fuertemente cuestionadas, en especial por parte de la ciudadanía, y los días de vacaciones, que llegan al menos a todo el mes de febrero, el Senado se ha propuesto hacer modificaciones al respecto.
Para el senador PPD Felipe Harboe, la situación se resuelve con que los parlamentarios deberían trabajar de lunes a viernes en el Congreso durante tres semanas, manteniendo la última como distrital, considerando que actualmente están obligados a asistir a las sesiones solo dos días a la semana.
"Podría perfectamente plantearse que la jornada fuera de lunes a viernes en el Congreso y que solo tuviésemos una semana al mes en nuestros respectivos distritos. Hay que ir avanzando a terminar con cualquier tipo de privilegios o situaciones que pueden ser cuestionables", detalló Harboe.
"Es muy importante y eso es un procesos que llegó para quedarse, bienvenido sea que se de ese debate y ojalá tengamos pronta aprobación de estas normas", sentenció el senador del PPD.