El abogado y doctor en filosofía Carlos Peña, considerado uno de los columnistas más influyentes de Chile, afirmó que el caso Penta ha revelado que la Unión Demócrata Independendiente (UDI) no es un partido político propiamente tal, sino sólo "el apéndice fraudulento" del holding.
En una columna llamada "El fraude de la UDI" publicada este domingo por el diario El Mercurio, Peña rechazó la "falacia grosera" del timonel Ernesto Silva cuando el viernes, al pedir perdón por el caso, afirmó que "no existe una responsabilidad institucional" y las irregularidades en el financiamiento de las campañas corresponden a "conductas individuales de algunos militantes".
"El caso Penta muestra que entre ese grupo y la UDI existía una íntima promiscuidad", reflexionó el académico.
"Formalmente la UDI parecía un partido político, esto es, una agrupación de personas que se trataban como iguales entre sí, que compartían ideas y aspiraban mediante la competencia electoral a ganar el gobierno. Aparentemente tenía dirigentes, es decir, personas dotadas de la inteligencia y la autonomía para conducirlo y promover las ideas que lo inspiraban. Todos creían que tenía un patrono, Jaime Guzmán, cuyas ideas sus miembros veneraban, y un líder histórico, Jovino Novoa, que respetaba y hacía respetar las reglas. Y en fin, la gente suponía que tenía parlamentarios: personas que se habían ganado la confianza de los ciudadanos y se esmeraban por promover sus intereses. Pero nada de eso era cierto", planteó.
"La UDI no era un partido político, sino en realidad el simple apéndice más o menos fraudulento de un holding empresarial, con cuyas cuentas e intereses se confundía; un partido que, en vez de dirigentes capaces, poseía socios o empleados de ese mismo holding", afirmó el rector de la Universidad Diego Portales.
El académico despreció la actitud "mendicante y pedigüeña" de los parlamentarios que pedían dinero a Penta a cambio de una "lealtad perruna y eterna". (Foto: UNO)
"El mismo Ernesto Silva es el ejemplo, cuyas instrucciones soterradas recibía por mail", agrega Peña, diciendo que la UDI es "una agrupación que no tenía en verdad un patrono, Jaime Guzmán, sino patrones, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín; un grupo cuyo líder histórico, Jovino Novoa, no era un líder sino simplemente alguien cuyo poder derivaba del hecho de ser un broker entre el holding y sus dependientes que fingían ser representantes del pueblo; un partido entre cuyos parlamentarios se escondían mendicantes y pedigüeños que ofrecían a sus benefactores una lealtad perruna y eterna, y algunos de los cuales se revelaron además como mentirosos, como fue el caso de Ena von Baer", argumenta.
Todos los anteriores antecedentes muestran que, "en suma, la UDI no era un partido político, era una dependencia del grupo Penta. Y el grupo Penta, por su parte, era el instrumento, en el gigantesco ajedrez del poder y de los intereses, de un par de voluntades individuales".
"Caso cultural"
"Hay en la historia política chilena variadas trampas en perjuicio del fisco en la derecha y en la izquierda, pero ninguna, hasta ahora, había comprometido la entera identidad de un partido y de sus dirigentes", sentenció.
Respecto del ex subsecretario Pablo Wagner, quien recibió 42 millones de pesos de Penta mientras era funcionario público, señala que "es obvia la manera en que todo eso lesiona la independencia de un político y salta a la vista el modo en que lo desprovee de dignidad. ¿Cómo puede aspirar honestamente al dominio del Estado quien está alimentariamente sometido a la voluntad de otro?".
"El caso Penta es un caso jurídico, por supuesto; pero es ante todo un caso político y cultural, una trama que muestra, como en un ejemplo, las formas opacas en que circula el poder del dinero, la manera en que se disfraza de emprendimiento a veces y de filantropía en otras, las máscaras sociales y políticas que se emplean para ocultar su tránsito y sus compromisos, las servidumbres personales que establece en quienes, sin embargo, presumen ser representantes del pueblo", señala uno de los párrafos finales de la columna.