Claudio Reyes, de Flacso, pronosticó menos votantes en el balotaje que el domingo pasado.
Añadió que son necesarios incentivos para que la gente de menores recursos se decida a sufragar.
El experto pronosticó una participación cercana a los seis millones de votantes.
Tras la baja participación en la elección de este domingo 17 de noviembre, que no llegó al 50 por ciento del padrón electoral, han surgido opiniones que apuntan a reponer la obligatoriedad del sufragio como una forma de recuperar la representatividad de estos procesos.
El principal temor es que en la segunda vuelta del 15 de diciembre entre Michelle Bachelet y Evelyn Matthei aumente la abstención ante la posibilidad de que la gente crea que la presidencial ya está resuelta, como explica Claudio Reyes, coordinador de proyectos de Flacso.
"Está el síndrome de la carrera ganada o de la carrera perdida. Muchos no van a optar por ninguno de los dos candidatos y simplemente no van a votar. Sin facilidades, ¿para qué moverse? Probablemente estemos en torno a los seis millones de votantes", dijo el especialista.
El experto clarifica el tema de las facilidades: "Donde menor participación se produce, en el caso de la Región Metropolitana son las comunas de la zona sur en comparación con las comunas de la zona oriente. ¿Qué me da a mí la política? ¿De qué me sirven los políticos? Son preguntas muy frecuentes en ese sector".
"Existe una mayor apatía en la participación, no hay educación, no hay incentivos. Desde el punto de vista logístico el estado no genera condiciones que faciliten esto. Si a alguien le significan 1.500 pesos desplazarse a un lugar de votación no veo por qué lo va a hacer si le significa una disminución de su ingreso", agregó Reyes.
"Habría que pensar cómo generar un entorno más favorable tanto de contexto como de apoyo logístico antes de tomar una decisión tan drástica en materia de obligatoriedad o voluntariedad del voto", planteó.
Insulza: Restablecer obligatoriedad
El secretario general de la OEA y ex ministro del Interior, José Miguel Insulza, planteó que "nosotros siempre hablamos de que había tres millones o cuatro millones de personas que no estaban inscritas. Ahora están inscritas y resulta que parece que igual no vinieron a votar".
"Yo no fui opositor al voto voluntario, pero creo que fue un error y los errores hay que reconocerlos. Habría que restablecer la obligación de los ciudadanos a votar", agregó Insulza.
Y el ex Presidente Ricardo Lagos recurrió a un argumento histórico: "Estos debates nuestros sobre voto voluntario u obligatorio fueron resueltos hace muchos años. En el Gobierno de Jorge Alessandri Rodríguez estableció que la cédula de identidad valía si usted estaba inscrito en los registros electorales y si usted había votado en la última elección".
