El desaforado senador dijo que fue una persona de esa nacionalidad quien lo atacó con un arma blanca.
Para el diplomático Mauricio Echeverry, se trata de un "juicio precipitado" y una "grave generalización que afecta a toda una comunidad" migrante.
La Fiscalía aún no encuentra indicios de un atacante con las características que señaló Fulvio Rossi.
El embajador de Colombia en Chile, Mauricio Echeverry, dijo que el senador Fulvio Rossi crea una "inconveniente atmósfera de estigmatización" al señalar que el ataque con arma blanca que denunció el miércoles lo cometió una persona de esa nacionalidad.
En una carta publicada por La Tercera, Echeverry lamenta "profundamente la agresión de que fue víctima el senador" y le expresa su "solidaridad", haciendo "votos por su recuperación" y el "pronto esclarecimiento de lo ocurrido".
Sin perjuicio de lo anterior, agrega: "Nos preocupa (que) las manifestaciones públicas en que se hacen imputaciones ajenas al rigor probatorio de cualquier investigación de naturaleza penal, como aquella conforme a la cual se afirma que el presunto agresor es colombiano por su acento y, acto seguido, se deducen de esta precaria premisa, graves generalizaciones que afectan a toda una comunidad".
"Conclusiones no probadas, como la anterior, no contribuyen al buen éxito de la gestión de las autoridades responsables de la investigación y pueden, por el contrario, crear una innecesaria e inconveniente atmósfera de estigmatización hacia toda una comunidad de personas de bien, respetuosas de la ley, que con su trabajo honesto han contribuido y contribuyen al desarrollo de esa región", expresa el diplomático.
"Esta Embajada se une al llamado de amplios sectores de la sociedad chilena a evitar juicios precipitados y ambiguas generalizaciones, y hace votos por el éxito de la prudente, rigurosa y oportuna investigación a cargo del Ministerio Público, con el apoyo de las autoridades policiales para que se identifique, capture y sancione a los responsables", concluye la nota.
Fulvio Rossi presentó el viernes una querella por los delitos de amenazas, lesiones menos graves y atentado contra la autoridad contra quienes resulten responsables del ataque. La Fiscalía ha dicho que aún no encuentra indicios de un agresor como el que describió el parlamentario.
