Diversos representantes del mundo campesino y vecinal de la zona declarada en "catástrofe" por el Gobierno en la región de Coquimbo, debido a la sequía, reaccionaron con conformidad y sostuvieron es "un alivio" que necesitaban desde hace tiempo.
Esto porque falta forraje para los animales, e incluso agua para el consumo humano, según reconoció Edith Tapia, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos rurales de la comuna de Illapel.
"Un alivio para todos nosotros, sobre todo para la gente del campo que estaba sufriendo con sus animales, que estaban pariendo, se les estaban muriendo por la sequedad, por la falta de lluvia, y muy contentos porque ellos han luchado bastante para que se pudiera decretar la zona, y al final se ha logrado, yo creo que es un gran alivio para todos", expresó.
En tanto, Héctor Páez, presidente provincial de los crianceros de ganado caprino, agregó que la medida ayudará a mitigar en parte los efectos de la sequía sobre los animales.
"Contento porque hemos tenido una gran posibilidad de pedir ayuda para los crianceros; nosotros estimamos que alrededor de un 70 por ciento de las crías han muerto de hambre y un 20 por ciento de los animales grandes, de las cabras madres, también han muerto debido a la falta de comida", detalló.
Pese a la ayuda que comenzará a llegar a la zona, desde los crianceros estiman que habrá una baja producción de quesos en la zona, según Páez, no más del "30 por ciento del queso que salía en años anteriores", por lo que predijo habrá un alza en el precio del producto lácteo.
Desde las autoridades, el Seremi de Agricultura, Juan Francisco García, advirtió que podrían llegar recursos desde otros sectores, al "agilizarse los trámites administrativos".