La Armada descartó que el buque Seikongen, que arribó recientemente a la bahía de Puerto Montt, sea un potencial peligro medioambiental, como argumentan alcaldes y vecinos de la zona.
El comandante en Jefe de la Quinta Zona Naval, Carlos Fiedler, comentó además que es probable que los salmones muertos se trasvasijen a otras naves más pequeñas al sur de Puerto Montt una vez que se apruebe el plan propuesto para ello.
Fiedler enfatizó que ese plan, que será revisado por las autoridades de Medioambiente y de Salud, "se va a autorizar siempre y cuando cumpla con todas las normas legislativas y de medioambiente de este país".
Este llamado a la tranquilidad llega después de que el municipio de Puerto Montt interpusiera un recurso de protección en la Corte de Apelaciones contra la autoridad marítima, debido a lo que el alcalde Gervoy Paredes (PS) ha calificado como "un acto de provocación".
Paredes desconfía de las palabras de la Armada, pues "resulta que nos vienen a señalar que de la noche a la mañana no tiene ninguna contaminación, (pero) eso es lo que se rumorea".
"En el caso de Puerto Montt, que tenemos 74 kilómetros de borde costero y asociatividad con Calbuco, con Caullín y con toda la zona, la verdad es que nos perjudica", indicó.
Pasadas las 14:00 horas de este jueves distintas autoridades se reunieron para coordinar el destino del buque. Por ahora, se estima que los salmones serán descargados en el puerto San José de Calbuco.