La red asistencial de Ñuble sigue con cifras preocupantes en una de las semanas más complejas de la pandemia, tras registrar solo un 7 por ciento de disponibilidad de camas críticas.
De acuerdo al último balance, hay 139 personas hospitalizadas, de las cuales 61 son pacientes críticos y 42 están conectados a ventilación mecánica.
El doctor Max Besser, subdirector del Servicio de Salud Ñuble (SSÑ), señaló que entre ellos "hay cinco pacientes críticos que ya habían completado el proceso de vacunación contra el Covid-19, pero que se infectaron antes de los 14 días transcurridos desde la segunda dosis".
Al respecto, subrayó que "tenemos que tomar todas las medidas de precaución no sólo mientras esperamos el proceso de vacunación, sino mantenerlo, porque también hay un riesgo de contagiarse y desarrollar, por lo general, un cuadro leve. Ninguna vacuna es 100% efectiva, siempre va estar el riesgo".
Alza exponencial de pacientes jóvenes
Otro aspecto preocupante es el alza exponencial de personas menores de 59 años en unidades de cuidados intensivos (UCI).
Al respecto, Besser indicó que "el grupo que más se está complicando en estas fechas, son quienes tienen entre 40 y 60 años", mientras que los adultos mayores en situación crítica han disminuido en dos tercios respecto a inicios de marzo, quedando sólo cinco en UCI.
Más camas críticas no es solución
El doctor Christian Esveile, médico internista del Hospital de Chillán, indicó que "la habilitación de más camas UCI no va solucionar el problema, sólo lo va a contener, a duras penas, como ya lo está haciendo".
Agregó que "acá hay un esfuerzo sobrehumano en habilitar camas, muchos están haciendo doble turno, además trabajando durante todos los días de la semana, para atender lo más adecuadamente posible a las personas que requieren hospitalización".
Un ejemplo latente de ello es que el fin de semana pasado se habilitaron 10 nuevas camas críticas, las cuales rápidamente fueron ocupadas por nuevos pacientes, fluctuando desde entonces una disponibilidad de tres a cinco.