El gobernador regional del Biobío, Rodrigo Díaz, aseguró no arrepentirse de "apostar" por trabajar con fundaciones, a pesar de que ese vínculo le costara ser imputado en el marco del caso convenios.
La autoridad hizo tal reflexión al cumplirse un año de que la Fiscalía iniciara sus diligencias por supuestas irregularidades en esa región -con 14 aristas hasta la fecha-, y en el cierre de un programa financiado por el GORE con esa modalidad.
"Tomamos la definición de trabajar con corporaciones y fundaciones para llegar donde no llegaba el Estado, y obvio que hemos tenido problemas, son todos conocidos. He entregado tres celulares al Ministerio Público por eso, (pero) no me arrepiento de haber apostado a trabajar con corporaciones y fundaciones", manifestó el gobernador.
El gobernador insistió en que "no me arrepiento de nada, primero porque no robamos, y segundo porque si no, ustedes no podrían estar acá", refiriéndose a las beneficiadas por el programa Fem Biobío, que impulsó emprendimientos e iniciativas científicas de más de 800 mujeres de esa región.
"Todos los problemas que hemos pasado, uno se los puede echar a los hombros en la medida que sabe que hay cosas como esta que han resultado. El que no hace nada, no corre ningún riesgo. Yo prefiero hacer cosas y equivocarme", remató la autoridad regional.
Díaz también aprovechó la oportunidad para reiterar que no se va a repostular al cargo en las elecciones de octubre, decisión que dio a conocer a fines de abril.