El hombre que denunció por robo a tres carabineros de la comuna de Hualqui, en la Región del Biobío, aseguró que los funcionarios -ahora dados de baja- se encontraban en estado de ebriedad al momento de los hechos.
Los efectivos policiales fueron dados de baja de la institución tras ser acusados de cometer un robo con violencia, estando de uniforme, en la madrugada y en estado de ebriedad en la calle, motivo por el que pasarán a control de detención.
Jonny Vivallos (31), el denunciante, contó que "esto pasó a las 04:00 de la mañana, me dirigía a la casa de mi mamá, me aborda un auto gris con tres carabineros adentro, dos de uniforme y uno de civil; uno de civil y otro de uniforme inmediatamente me golpearon".
"Me robaron 50 mil pesos y mi teléfono celular, yo los veo, los conozco, los veo todos los días aquí en Hualqui, sé quienes son, todo el mundo los conoce. Todos saben los carabineros que son, que se toman un trago, y salen a quitarle las cosas a la gente entre las 03:00 o 04:00 de la mañana, esto ya ha pasado, los tres estaban en estado de ebriedad", agregó el denunciante.
La versión de Carabineros
El coronel Rolando Molina, prefecto de Carabineros de Concepción, con el análisis recién de los primeros antecedentes tomó la decisión de expulsarlos de la institución, ya que aseguró que los funcionarios se encontraban en hora y lugar denunciada.
"Ellos en todo momento han reconocido su participación hasta una riña o agresión entre ellos, porque el denunciante tiene antecedentes policiales y en distintas oportunidades ha tenido confrontaciones con ellos mientras realizaban sus funciones como Carabineros en el sector de Hualqui", indicó el oficial.
"Al verlos en la noche, lo confrontaron y se habría producido una riña. Los antecedentes del robo que él denuncia están en poder y en parte de la investigación que la PDI está realizando", cerró.
Amplían la detención de los implicados
Durante la mañana de este viernes se decidió ampliar la detención de los tres acusados, ahora ex carabineros.
Y así lo explicó la fiscal Claudia Peña, quien señaló que "existían diligencias fundamentales para poder formalizar la investigación y para pedir la medida cautelar que corresponda, y es por eso que se ha solicitado la ampliación de la detención para realizar estas diligencias y posteriormente para continuar con el proceso de la formalización respecto de los imputados".
El defensor penal público, Claudio Vigueras, quien representa a los ex funcionarios, refutó al Ministerio Público señalando que los antecedentes que faltaban en esta instancia "podrían haberse obtenido sin ningún problema".
"Por ejemplo, no se contaba con un comprobante de constatación de lesiones de la víctima, y eso en un contexto en que la propia Fiscalía pidió una orden verbal de detención, que se supone que tiene los antecedentes suficientes para formalizar a los imputados, nos pareció completamente inconsistente", puntualizó el jurista.