El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve (PS), acusó que la falta de colaboración del régimen de Nicolás Maduro le ha dificultado a Chile la expulsión de ciudadanos venezolanos, decretadas tanto por la vía administrativa como judicial, fueren por haber ingresado irregularmente o haber cometido delitos en nuestro país.
Tras el crimen del teniente de Carabineros Emmanuel Sánchez, ocurrido anoche en un tiroteo en la comuna de Quinta Normal, la autoridad confirmó que Julio César González, el venezolano que también fue abatido en el suceso, mantenía una orden de deportación desde hace cuatro años.
Monsalve precisó que el delincuente había ingresado a Chile por un paso clandestino en 2019, "antes de que llegáramos al Gobierno", lo que "demuestra que este problema no es solo de este Gobierno, es un problema que ha cruzado gobiernos".
"Hay algunos que se olvidan que para expulsar a un ciudadano venezolano no sólo se requiere encontrarlo, para lo que hemos modificado la ley. Se requiere tener autorización del gobierno venezolano para entrar a su espacio aéreo, y se requiere que el gobierno venezolano previamente haya corroborado su identidad", explicó.
"El interés del Gobierno (chileno) es expulsar. Hemos destinado recursos a la expulsión, hemos cambiado las leyes para expulsar", enfatizó, "pero -reprochó- sin la colaboración decidida del gobierno venezolano, es muy difícil que Chile pueda cumplir los objetivos materiales de expulsar".
Una dificultad que ha afrontado Chile tiene relación con las expulsiones de venezolanos, dado que ha habido resistencia en Venezuela para recibir los vuelos chárter de la Fuerza Aérea chilena con ese fin. Ante ello, el Ministerio del Interior ha tenido que optar por vuelos comerciales, con la limitante de que actualmente salen dos vuelos diarios entre Santiago y Caracas y sólo puede enviarse un máximo de dos deportados por avión, y que cada uno debe ir acompañado por dos escoltas.
"EL CLIMA DE RELACIONES HA TENIDO UN GIRO RADICAL"
En ese escenario fue que Monsalve viajó en enero al país caribeño para reunirse con autoridades local, y selló el mentado convenio de colaboración sobre intercambio de información para combatir el crimen organizado, pero que aún no ha sido implementado.
"Buscamos durante algunos meses establecer un clima político de relaciones que permitiera favorecer dos cosas que son muy importantes para Chile: que se autorizara que vuelos chárter pudieran aterrizar en Caracas para llevar adelante las expulsiones de ciudadanos venezolanos que estaban en situación irregular en Chile; y también buscamos crear un clima de colaboración con el gobierno venezolano para poder identificar a las personas que están en Chile y tienen antecedentes penales para poder expulsarlos", expuso el subsecretario.
Sin embargo, "ese clima en las últimas semanas ha tenido un giro radical", fustigó, sobre todo tras la nueva narrativa de Venezuela de negar la existencia de la organización criminal transanacional conocida como Tren de Aragua: "Evidentemente las declaraciones del canciller venezolano cambian completamente el clima".
De hecho, provocó que el Presidente Gabriel Boric Boric decidiera llamar a consulta al embajador de Chile en Venezuela, Jaime Gazmuri.
"Por eso las relaciones diplomáticas a veces son tan importantes y hay que ser tan rigurosos en enfrentarlas. (Y) el Presidente está evaluando las relaciones diplomáticas con Venezuela", afirmó Monsalve.
Por el crimen del teniente Sánchez hay tres detenidos, todos de nacionalidad venezolana, mientras que un cuarto sujeto sigue prófugo.