La vocera de Gobierno, Camila Vallejo, desestimó el ultimátum dado por la oposición a la ministra del Interior, Carolina Tohá, asegurando que no existe la capacidad logística para llevar a cabo todas las expulsiones de migrantes.
Durante este viernes, Vallejo recalcó que "no podemos exigirle a otro que haga todo lo que no fuimos capaces de hacer, y eso es lo que está haciendo un partido que fue de gobierno en el período anterior, que no fue capaz de expulsar a todas las personas que había que expulsar administrativamente, hoy exija en un mes expulsar 10 veces de lo que pudieron ellos. Se requieren muchos recursos y una capacidad logística que en un mes no se puede desarrollar".
"El trabajo lo estamos haciendo, falta, por cierto que falta, pero no se va a solucionar con declaraciones rimbombantes y altisonantes, y menos con amenazas, porque, además, (son) bien poco creativas", sentenció.
Horas después, y de visita en Colchane, Tohá respondió que "me ha pasado varias veces en la vida recibir amenazas: las recibí en dictadura, de parte de grupos radicales siendo alcaldesa, de grupos de presión siendo diputada, pero nunca había recibido amenazas de autoridades electas democráticamente, nunca".
"Espero que sea la última vez", subrayó la jefa de gabinete.
La ministra enfatizó que "las cosas que nuestro Gobierno está haciendo en materia de control fronterizo, y de asegurar que la irregularidad no siga predominando en materia migratoria, las hacemos por compromiso con los chilenos y las chilenas, con su seguridad, con su bienestar. Lo hacemos por compromiso con Chile, no las hacemos ni las haremos porque nos amenazan".
"Efectivamente tenemos que mejorar en materia de expulsiones, no porque haya amenazas, sino porque es una necesidad. Nuestro Gobierno -y quiero decirlo claramente- no tiene ningún complejo ni inhibición de expulsar en aquellos casos que la ley lo recomienda", insistió.
DIPUTADOS Y EXAUTORIDADES CONTRASTAN POSICIONES
Desde el Congreso, el diputado Jaime Naranjo (PS) planteó que "la oposición quiere lavar su imagen y su propia responsabilidad en la inmigración ilegal. Todos recordamos muy claramente que el tsunami de migración ilegal venezolana comenzó con la invitación que hizo en Cúcuta el presidente Sebastián Piñera".
En contraste, Andrés Longton (RN) manifestó que "lo que tiene que hacer la ministra es muy simple, cumplir con sus obligaciones constitucionales y legales, y dejar de lado ese romanticismo y simpatía que tuvo quizás el Presidente Boric y su sector en el período anterior. Presidente, cuando cometen delitos es demasiado tarde, hay que expulsarlos antes".
El exsubsecretario del Interior Felipe Harboe, que abordó el asunto con las actuales autoridades en las últimas horas, estimó que declaraciones como las de la oposición son "un despropósito, una tontera", pues "lo que se requiere de verdad es combatir el delito y a los criminales, no seguir combatiendo entre políticos".
"Llamaría a no perder el tiempo en peleas, y concentrarse en soluciones, que es lo que corresponde hoy día", acotó el exsenador.
En tanto, el exministro del Interior Rodrigo Delgado (UDI) insistió que "hay que aprender del pasado, hay que volver al estado de excepción en la Macrozona Norte, para facilitar los patrullajes mixtos, justamente porque es en este Gobierno donde se ha duplicado el ingreso clandestino, versus las cifras que teníamos en el gobierno anterior".
Durante la tarde del viernes, el Presidente Gabriel Boric se reunió con las autoridades de Interior y, a través de un escueto comunicado, anunciaron la implementación de un plan operativo de intervención territorial.