Antonio Frey cuestionó el indulto otorgado por el Gobierno anterior a 4.000 reclusos.
"Uno de cada cuatro de esos reos han vuelto a delinquir. Casi un 25 por ciento, lo que es inaceptable", indicó.
Frey acusó al ex Presidente de no cumplir su promesa.
El subsecretario de Prevención del Delito, Antonio Frey, cuestionó el indulto otorgado por el Gobierno del ex Presidente Sebastián Piñera a 4.000 reclusos indicando que se abrió las puertas de las cárceles de "par en par" a ladrones y traficantes y se le puso motor a la puerta giratoria, ya que uno de cada cuatro a vuelto a delinquir.
"Gendarmería y las policías trabajaron con la lista de indultados y verificaron que habían muchas personas que siendo beneficiadas por el indulto (general) de Sebastián Piñera en 2012 volvieron a cometer delitos flagrantes detectados por la autoridad. Estamos hablando que 900 personas indultadas por Piñera, que cometieron 1.222 delitos. Eso da cuenta de que algunos perpetraron más de un ilícito", informó.
La autoridad explicó que el total de los que recibieron este beneficio fue cerca de cuatro mil reclusos, lo que equivale a alrededor del 10 por ciento de la población penal de ese entonces.
"Aquí lo que hizo el Gobierno anterior fue abrir las puertas de las cárceles de par en par a ladrones y traficantes que, una vez fuera, reincidieron. Uno de cada cuatro de esos reos han vuelto a delinquir. Casi un 25 por ciento, lo que es inaceptable", declaró a La Tercera.
Además, declaró que aquellos extranjeros que estaban en las cárceles y fueron expulsados con prohibición de reingresar al país finalmente volvieron a delinquir y regresaron a Chile.
Frey detalló que esto se explica porque el indulto, en términos jurídicos, es un momento en que se deja de aplicar una pena, por lo que no corresponde hacer un seguimiento.
"Por eso, es una herramienta que hay que trabajar con mucho cuidado. Después de ese beneficio tienes una condena que se extingue. Las medidas que se pueden tomar son administrativas. Es una medida extrema, que se ejecuta en casos extremos", agregó.
Por último, señaló que "en el primer Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet terminamos en 2009 con alrededor de 56 mil personas dentro de la cárcel. Una vez que finalizó el Gobierno de Sebastián Piñera teníamos 47 mil, o sea, nueve mil menos (...) Acá tenemos una promesa incumplida. En vez de haber trancado la puerta giratoria, se le puso un motor".
Las medidas propuestas
El subsecretario Frey anunció que actualmente se trabaja para "una fuerza de tareas, un equipo jurídico que permita, junto con las policías, ir alertando sobre los casos que van reapareciendo para hacer un seguimiento y, cuando sea pertinente, querellarnos para que sean condenados y se les quite la libertad".
"No corresponde que una persona a la que se le dio un beneficio, un perdonazo, se le permita volver a delinquir inmediatamente habiéndose comprometido a no hacerlo", sostuvo.
También afirmó que se utilizará el Banco Unificado de Datos -que será implementada el 31 de diciembre- que "permitirá a las policías contar en línea y en tiempo real del listado de personas indultadas que hayan quebrantado sus penas o se encuentren con orden de detención pendiente".
Además "se oficiará a las policías para que establezcan cuál es la situación actual de los indultados y si volvieron a cometer delito. Se reforzará el trabajo legislativo que estamos realizando en el sentido de crear una agenda corta antidelincuencia. Seremos fuertemente restrictivos con las personas que reinciden".
"Este gobierno no propiciará ninguna iniciativa de indulto general y restringirá al máximo el otorgamiento de beneficios mientras no esté en funcionamiento el Servicio Nacional de Reinserción Social, el que contará con un estricto control de los condenados. La creación de ese servicio fue una promesa de Piñera, que no cumplió", añadió.
