La Presidenta Michelle Bachelet participó en la mañana de este martes en la instalación de una de las 12 estaciones de monitoreo sísmico ubicadas en la falla de San Ramón, las que servirán para tomar medidas en caso de sismos importantes.
En la actividad que se llevó a cabo en el observatorio Pailalén en la comuna de San José de Maipo, se destacó la importancia de este proyecto, logrado gracias a un acuerdo entre la Subsecretaría del Interior y la Universidad de Chile.
La Mandataria sostuvo que el monitoreo será clave para tomar medidas destinadas a prevenir, "de manera que tengamos información constante, mayores detalles de su actividad y de su extensión, y esto que pudiera parecer altamente técnico es sin embargo esencial para algo que como país necesitamos siempre, que es generar estrategias de prevención y protocolos de acción para cómo reaccionar en caso de sismos importantes".
Por su parte, el director del Centro Sismológico Nacional, Sergio Barrientos, indicó que "por cada terremoto de magnitud 7 hay diez terremotos de magnitud 6, hay cien terremotos de magnitud 5 y mil terremotos de magnitud 4".
"Entonces, nuestra esperanza es conocer un poco mejor la tasa de actividad de la falla, la productividad sísmica de la falla, escudriñando aquellos pequeños temblores de magnitud 2, magnitud 3 y para poder hacer eso uno requiere establecer estaciones sismológicas en la cercanía de la falla, muy cerca de los focos donde están ocurriendo, porque sino se atenúan muy rápidamente y uno los pierde", explicó.
A su vez, el director nacional (s) de Onemi, Víctor Orellana, señaló que los datos que arrojen las estaciones de monitoreo también serán relevantes a la hora de coordinar los planes preventivos con la comunidad.
Indicó que se busca afinar "cuáles son las capacidades que hay que desplegar a la hora de que tengamos un evento de este tipo. Anticiparse, tener información y de esa forma poder reforzar nuestros planes de respuesta a todo nivel, nacional, regional, comunal y lo que pueda hacer cada familia para estar preparada ante un evento de este tipo".
"La falla, como objeto de estudio, no tiene más de 15 años"
El geólogo Gabriel Vargas, director del proyecto, recalcó que "por primera vez probablemente estamos enfrentando la posibilidad de antecedernos a un evento al iniciar monitoreo sísmico en forma permanente de un objeto que sin duda representa una amenaza para Santiago, pero no así imposibilita su desarrollo como es la falla de San Ramón".
Dio cuenta que "el desarrollo hoy que ha tenido Santiago no se hace cargo de este objeto que es un objeto nuevo. La falla de San Ramón, como objeto de estudio, no tiene más de 15 años. Entonces, desde esa perspectiva también es entendible que cueste más hacer ver su importancia".
"Sin duda hay antecedentes previos, pero como tal la importancia para el peligro sísmico no tiene más de 15 años. Entonces, Santiago no se ha venido desarrollando de modo que considere esta falla y eso es lo que queremos, que la ciudad considere la falla y que el desarrollo de Santiago sea de ese punto de vista sostenible", sentenció.