El próximo miércoles Primero de Mayo se conmemorará el Día Internacional de los Trabajadores, fecha en que está convocada la tradicional marcha de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) en distintos puntos del país.
Desde la principal coalición de sindicatos del país buscan impulsar un "salario vital" que llegue a 630.000 pesos, que sería la línea de la pobreza para una familia de cuatro personas.
"Estamos convocando a todas las trabajadoras y trabajadoras del país a una gran marcha para este Primero de Mayo. En Santiago, la convocatoria es en Plaza Los Héroes a las 10 de la mañana y esperamos que sea una marcha que dé cuenta de las demandas transversales del movimiento social", dijo el secretario general de la CUT, Eric Campos.
El dirigente afirmó que "el discurso va a estar basado en los contenidos del Manifiesto Social, pero por sobre todo también respondiendo a la coyuntura sobre el debate de 'salario vital' y la demanda que hemos hecho al Gobierno que cumpla el envío del proyecto de ley de negociación ramal que devuelva poder a los sindicatos, a las federaciones y a las confederaciones".
40 HORAS "CON SENTIDO COMÚN"
Esta Primero de Mayo tendrá como telón de fondo la entrada en vigencia de una de las políticas en materia laboral impulsadas por el Ejecutivo: la reducción de la jornada laboral a 44 horas a partir del viernes pasado y que gradualmente llegará a 40 horas en 2028.
Ahora que comenzó la puesta en marcha de esta ley, el foco de la Dirección del Trabajo (DT) está puesto en su correcta implementación. La semana pasada, el organismo publicó un dictamen en el que establecía que la reducción de la jornada no se debe aplicar por minutos, sino por horas a la semana, a menos que se llegue a un mutuo acuerdo que así lo decrete.
Al respecto, el diputado de Renovación Nacional y miembro de la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja, Frank Sauerbaum, dijo que "lo que nosotros esperamos es que haya un acuerdo mutuo rápidamente entre ambas partes (trabajadores y empleadores) y se haga algo que tenga sentido común".
"Lo que no puede pasar", advirtió, "es que alguien pretenda rebajar la carga horaria del trabajador, por ejemplo, 12 minutos diarios, considerando que eso no le cambia la vida a nadie ni se facilita también la relación laboral. Nosotros esperamos que se lleguen a acuerdos que tengan sentido común, como, por ejemplo, que el día viernes, el último día de la semana, se salga una hora antes o los días lunes se entre una hora después para ir a dejar a los niños al colegio. O sea, que tenga un resultado real en el mediano y corto plazo".
Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), José Pakomio, afirmó que "se trata de un escenario complejo, con cambios importantes para las empresas, no solo en temas de costos, sino también en procesos internos, nuevas obligaciones e incluso implementación de protocolos".
Debido a esto, aseguró que "se requiere que la puesta en marcha de todas estas nuevas normativas sea de manera gradual, para no afectar tampoco la formalización de las pymes".
ROL DE LOS SINDICATOS
Desde el oficialismo, los diputados Andrés Giordano, de Revolución Democrática, y Luis Cuello, del Partido Comunista, afirmaron que es importante potenciar la sindicalización para la correcta implementación de la ley.
"Lo más complejo de la implementación, dada la cantidad de denuncias derivadas del aprovechamiento de empleadores que han interpretado de manera muy antojadiza, es que exista una buena coordinación entre sindicatos y trabajadores y trabajadores para realizar las denuncias cuando esto ocurra y, sobre todo, que exista la fortaleza institucional desde la Dirección del Trabajo para garantizar que este puntapié inicial cumpla con el compromiso de rebajar una hora al día las jornadas", señaló Giordano, integrante de la Comisión de Trabajo de la Cámara.
"Un trabajador afiliado a un sindicato está mucho más protegido frente a eventuales abusos, como la intención de algunas empresas de rebajar solo seis minutos o 12 minutos la jornada laboral", enfatizó Cuello, presidente de la mentada comisión.
Cabe recordar que el Día de los Trabajadores corresponde a uno de los cinco feriados irrenunciables del año, por lo tanto, el comercio cerrará sus puertas, incluidos supermercados y centros comerciales.
Podrán funcionar clubes, restaurantes, establecimientos de entretenimiento, casinos de juego, bencineras –y sus tiendas asociadas- y también las farmacias de turno, además de los negocios que estén atendidos por sus propios dueños.