Los trabajadores depusieron esta mañana la paralización nacional iniciada el lunes.
La protesta graficó la relevancia de este gremio para el funcionamiento de las ciudades.
Aunque esta mañana terminó el paro nacional de los recolectores de basura, los trabajadores mantienen sus quejas por los bajos sueldos y malas condiciones laborales a las que están sometidos: denuncian la falta de horarios fijos y turnos que superan las 13 horas.
"Llegamos a las siete de la mañana y terminamos a las ocho o nueve de la noche lunes y martes", contó un recolector a Cooperativa.
"Estamos trabajando 15 ó 16 horas diarias. Yo para llegar a 320 mil pesos tengo que trabajar de domingo a domingo", explicó otro empleado.
"Llevo 30 años en esta pega, yo quiero este trabajo, pero es muy mal admirado, en el sentido de que ganamos muy poco", confirmó otro recolector.
Entre los jardineros y las personas que barren las plazas y calles del centro de Santiago se repite el reclamo por los bajos salarios, no así por la extensión de las jornadas: "Ganamos el mínimo", contó Luis Landeros, de 73 años, quien hace 23 trabaja en la comunidad Parque Agustinas, donde limpia jardines.
